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cuidado al salón— Disculp

estamente no era la mejor profesora, pero al menos la dejaba pasar cada que llega

se le dañó el carro, y como no hay repue

sa algo a ti. —contestó la profeso

s, ya citen a sus representantes. —habló Paula— No es justo que a ella sí

le importan. —le dijo la profesora— Hágame el favor de guar

con una mente brillante para los estudios, pero su personalidad dejaba mucho que desear. Alexandria y ella no se llevan bien, por

dria, no soporta tener que calarse s

oy. —susurró Diego— Niña, es qué acaso m

obvio no. —le respondió sa

a la mía. —bromeó— No, en serio, sí estaba temblando, prácticamente er

es como esas, a todos les caía bien él, ya que él no qu

s de la semana metidos en este lugar, así que no intentes hacerte e

eso prefiero estar metido en una caja con pura

ano a lo que podría llamar mejor amigo, porque ha estado con

r el hecho de que consiguió nuevas amigas con el tiempo y solo decidió hacerla a un lado, esas cosas pasan, pero para ser honesta, c

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ella se volteó rápido con una evidente ca

a saber

ca amiga, hazme el favor, claramente tú eres

e esta chica es toda una máquina, el cerebro de ella va a mil por hora. La química no se le da para n

cupado cada final de lapso sumando lo que llevaba acumu

o tú quieres aprender química si ni tú mis

ina? Si fuera por mí, yo pediría mi título de bachi

a universidad es bien f

dole un golpe al escritorio— ¿Acaso están más

estamos haciendo.

ase a la pizarra y resu

o— Déjeme hacerlo yo, creo qu

oda la guía, Curie. —dijo Diego en voz a

o nivel de inteligencia, no tiene uno de los mejores promedios del salón p

ndria, como si todo aquí tuviera el nombre de "Paula Teixeira" escrito, siempre llev

ó la profesora— Toda la reacción está buen

ino, otra de sus compañeras—

rlo, o porque quiere un

cosas, prof

pizarra ent

había personas que ciertamente no pegaban con él y su manera de pensar (Paula, por ejemplo). No consideraba que fuera r

aba la frase: "Dime con quién t

gadas con pega loca, no se separaban jamás. A menos de que Paul

mientras se sentaba en su mesón— A

ejercicio nad

quitándose su

a reprochó— Si tú eres

físico, Dieg

de química, no de histori

salir de clase puedo ha

io, novio de Paula; su grupo en general estaba conformado por su mejor ami

? —preguntó

o necesito que lo hablemos dentro de

parece que Ignacio es lindo, aunque definitivamente Diego no es su tipo, porque pues a Ignacio no le gustan los hombr

esa cara, sí

verle el brazo, emocionado— ¿Acabas

con lo de química, bájale dos. —susurró— Adem

a de que no querer taparle la boca con cinta adhesiva— Segundo es salir, el tercero besarse, y mira mamita,

ueña cabecita tuya. —contestó— Es solo un compañero más, entié

egados a la tierra demasiado en serio, Diego n

bar el novio a Paula. —dijo— Te adoraría, te

esa? —desvió su vista al cuaderno— Si crees que eso solo pasaría si mi p

de amor, eres joven y bella, si te lo propone

ven. —respondió— Si te la quieres tirar de casamente

ana en la puerta del salón, y Diego

is meses, Diego nunca había sido tan feliz en su vida, no le interesaba que apenas él sea su primer

que ha podido existir, después de

ntó la mano— ¿Será

r con tu amante, Di

fastidioso de primera, el payaso del salón que lo único que sa

di? ¿Acaso eres i

s" a sus compañeros, para él y su grupo tal vez eran graciosas, pero para los

la profesora, levantando la vista d

, profe, cuidado que aún a m

me termine de colmar la pa

oy, y

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arda más de quince minutos ¿cómo hace uno si tiene diarrea, Sava? Insensible, a Diego

a Luisfer, su chico adorado, lo más be

paso

a, amor, no te escribí en todos estos días porq

ual, bueno, siempre es una mierda, pero

quí la señal de

como cosa rara, cerca de la urbanización donde viven se habían robado los cables, solo p

vemos, que tengo clase

a última vez que raspé, con 06, un solo examen el lapso pasad

lo menos que ha

do con alguien que me dis

amente... Así que nada, bro,

entrar a su salón— Ah, por cierto, avís

oca del año es normal que llueva casi que todos los días. Alexandria y Diego se sentaro

a. —dijo Alexandria sacando algunas camisas

conserva esa ropa, supongo que se la iba a dar a mis primos chiquitos, p

dijo Diego— Espero que no le moleste t

, cerrando la bolsa— Necesitaba ropa nueva, ya l

a, y cuando le tocó escribirle a Luisfer, después de estar una semana conven

ara comprársela, de vez en cuando también le Diego le daba ropa vi

ba a Alexandria con su hermana, Verónica, porque ella siempre velaba por su hermano menor

ntas cosas en su vida y ver cómo ha salido adelante, ju