img Sí, acepto el contrato.  /  Capítulo 5 ¿Quién es usted | 11.90%
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Historia

Capítulo 5 ¿Quién es usted

Palabras:2238    |    Actualizado en: 18/06/2022

ra

ue me aterra lo que pueda pasar con su compañía, desde que estoy aquí no he visto a una persona con las capacidades que él tiene para seguir como jefe, el segundo al mando aquí no hace mucho, Danilo solo se dedica a morbosear a las trabajad

aun sin saber cómo procederán las cosas, pero en medio de mis proc

es la voz del

ucharlo señor Nicholas, bu

amento llamarte fuera

nada, siempre estoy en disposició

a próxima semana, no creo volver a la empresa por un tiempo así que lo mejor es que posponga

ar el trabajo de esa manera, ¡Dios mío! Me preocup

, como us

os, en las bodegas, en la fábrica, en todos lados da aviso de mi situación de salud; a

igo interr

Díg

tonto porque el claramente no podrá continuar, pero me genera curiosidad lo que pa

jo Jackson vino a la ciudad, le he pedido que regresara para que se haga ca

eñor, co

sará conmigo, pero no hay más que hacer, solo queda esperar

presa y parece que todos coment

icen de repente hacien

me has dado —menciono pon

sabes del señor Brown, ya se rumora que su hijo vino a la ciu

ielos, pensé que era la

dad? —cuestiona el

e me dijo esta maña

demás estaban t

que están felices porque

es tonta, lo digo porque vie

a mencionado solo un par de

York, quiso abrir su negocio de mane

como sabe más que yo que paso con el jef

, te contaré por

s archivos en físico en su escritorio, sin querer visualizo un papel que sobresale de su gaveta, miro a todos lados que nadie esté cerca y abro un poco más para ver de qué se trata, pues todo lo que entra y sa

inversionistas? —pregunta mi jefe sin saludar con voz

que comprenden la situación, sin embargo uno de ellos vino en pe

ventas de este mes, te agradecería que si vienes esperes a que Dila se v

haciendo? —se escucha

ndo, ya salgo —dice

me han dado una orden y mi deber es cumplirlo, su esposa

los pueda firmar y salgo de allí, en el camino me topo con muchos que preguntan por la evolución del jefe, también algunas que

sta creo que los conductores me retuercen los ojos, miro mi reloj y se me hace tarde, me desespero un poco pero a lo lejos veo un taxi acercarse, es mi única oportunidad, es

nta el hombre asománd

o abriendo la puerta

así la habría arrollado, ¡Dios! Solo me encuentro con puras

que hago, quizás piensa que estoy chiflada

onde pidió —menciona c

, soy muy cuerda, de verdad —respondo

r a café me hace desviarme y cambiar el rumbo por unos minutos, am

afuera mientras le doy un sorbo a mi café

l número de la llamada, es mi mamá, pero ahora no puedo responderle, más tarde lo haré; el ascensor ha llegado así que vuelvo a meter

mi ropa y no me fijo en el animal que ha llevado por delante, ¡Carajo! No me atropella un tax

e entrar —contesta

da un poco pero aun as

me has quemado el pec

preocupes —menciona creyén

o este solo sigue su camino mirando que al

ebí usar camisa

i jefe toco un par de

l hombre desd

línica, más parece la suite de un hotel, le doy una sonrisa a mi jefe y disimu

vendrías —dice

ir —señalo la mancha de café y luego abro la bolsa para sacar el fold

ponde tomándolo y guardánd

verlo señor —sigo para

iz, me hacen mucha falt

en estos días ha hecho falta escuc

rio y me alegra haber

contrarías mi hijo aquí, a

a la compañía? —cuestio

, cre

dría —menciona su esposa

, que gusto ver

rme —dice el s

saber cómo e

seña con su mano para que me vaya, sabe que su esposa podría po

a de irme —digo acomodand

osas por la empresa —dice sentándose y mirando c

remos más largo y tendid

ue Susan está sentada en una de las mesas charlando con uno de los coordinadores de finanza, últimamente la veo muy cercana a él, camino

—dice Tony a los pocos segund

to? —pregu

osas que terminar, a la pró

a razón de su escapada repen

ees? —dice mi amiga

sto lo lindo de su sortija de matrimonio —respon

—menciona ella co

llo entonces? —pregun

ya luego le

tra al edificio, sale un suspiro

que ese hom

bueno, me parece

ponerme de pie y entrar a ese enorme edi

, no te vayas —insiste la

uí, esto solo está

a la gente enamorada, solo que ya me han pasado cosas

a, frunzo mi ceño extrañada, no recuerdo haberla dejado abierta, hago caso omiso y un par de metros antes d

a al notar a un caballero de traj

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