El desprecio

Richard un hombre atractivo; alto, blanco, corpulento, y con grandes ínfulas de superioridad, pero con la mala costumbre de conseguir todo lo que se le antojaba al modo que fuese, nadie podía negarse a cumplir sus caprichos, o satisfacer sus bajos deseos.

Richard siempre decía:

̶ No ha nacido la mujer que se me resista

Nacido de una familia de empresarios, Richard estaba acostumbrado a tener todo lo que quería; desde niño fue complacido por sus padres con todas las cosas que pedía y aun lo que no pedía lo tomaba sin pedir disculpas.

Su padre Richard Benson, era un hombre severo que golpeaba a su madre si esta se negaba a satisfacer sus deseos sexuales, además le era infiel con su secretaria.

Su madre Katherine abrumada dejo a su padre al enterarse de sus infidelidades, y una noche huyo de casa, intentando llevarse al pequeño Richard con ella, pero su padre la sorprendió.

Richard (Padre) dijo:

̶ Huyes como una ladrona de tu propia casa .

Prendiendo la luz de la sala, sorprendiéndola a mitad de la noche

̶ Huyo de mi verdugo, y de la prisión que me has impuesto.

Contesto, Katherine desafiantemente, llevando una pequeña mochila en los hombros con solo lo necesario de alimento para algunos días fuera de casa, vestida con pantalón azul, camiseta blanca, zapatos deportivos y una gorra negra.

Llevaba escondido en la mochila una bolsa con ropa de niño y algunas cosas del pequeño Richard.

Richard (Padre)

̶ Si me dejas, me voy asegurar que jamás, vuelvas a ver a nuestro hijo.

Katherine contesto:

̶ No me alejaras de él, voy a llevarlo conmigo.

Subiendo las escaleras de la sala, para llegar al cuarto del pequeño Richard, despertarlo y llevarlo con ella.

Richard (Padre) dijo:

̶ Sobre mi cadáver te llevas a mi hijo, para llevar una vida mediocre a tu lado .

̶ Mi hijo no será un débil como tú, será un hombre exitoso de negocios rodeado de hermosas mujeres y un futuro brillante, que tu jamás le ofrecerás .

Subiendo las escaleras tras ella, halo su cabello con fuerza tambaleándose ambos en la escalera, Katherine perdió el equilibrio y cayó varios escalones hacia abajo, hasta llegar al piso de la sala.

Richard quedo atónito mirando desde el 4to escalón como Katherine rodaba por las escaleras, asombrado bajo los escalones rápidamente hasta llegar a la sala.

̶ i Katherine, Mi amor!

Gritaba desesperadamente, mientras agitaba su cabeza esperando que reaccionara, mirando sus manos noto que estaban llenas de sangre, Katherine había sufrido un golpe muy fuerte en la cabeza y murió.

Mientras tanto el pequeño Richard estaba escondido detrás de unas de las barandas de la escalera de la sala y al mirar que su mama rodaba por las escaleras, salió rápidamente de su escondite, en donde iba cada que su padre y su madre se peleaban. Bajo las escaleras con rapidez y le pregunto a su padre.

̶ i Papa!

̶ ¿Qué le paso a mama?

El niño mirando a su padre con llanto, esperaba una respuesta, pero su padre mirando a su esposa muerta en el piso, se quedó mudo, pues ninguna palabra podría explicar lo que paso esa terrible noche.

Luego de perder a su esposa por su negligencia y de tener que criar a su hijo solo, Richard tomo varias decisiones equivocadas, que llevaron al pequeño Richard a pensar, que su madre solo era una mujer débil e inútil y que el hombre debe tener una personalidad de acero impenetrable.

A la edad de 18 años el joven Richard Benson ya era todo un don juan, su padre quien anduvo, de mujer en mujer y de motel en motel, le dio a entender que esa era su prioridad además de su trabajo incansable.

El 24 de octubre día en que el Joven Richard se iría a la universidad, su padre quiso darle un obsequio que jamás olvidaría. Un auto último modelo

Richard (Padre) dijo:

̶ Ya tienes edad para ir a toda velocidad, hijo tengo un regalo para ti .

Abriendo el garaje de su casa, se dejaba entrever el auto deportivo rojo que su hijo tanto le había pedido, y que como todo padre complaciente no podía dejar de comprar.

̶ No puede ser, un Vmw eres el mejor padre del mundo.

Dijo el joven Richard, Con los ojos llenos de encanto y fascinación por su automóvil nuevo

Richard (Padre) dijo:

̶ Escucha lo que te voy a decir hijo.

̶ Mientras tengas dinero, nada es imposible.

̶ No ha nacido la mujer que se te resista, esas son las dos llaves para el éxito .

Dándole las llaves del auto, y montándose uno al lado del otro salieron a dar un paseo.

A la edad de 25 años Richard era todo un adulto, trabajando hombro a hombro al lado de su padre en el área de publicidad se volvió un experto para los negocios tanto así, que invertía grandes cantidades de dinero en negocios turbios que terminaron por descapitalizar la empresa de su padre.

Hechos que poco a poco fueron llevando al viejo Richard Benson a su tumba.

Luego de la muerte de su padre quedando completamente solo, Richard lleno de profundos vacíos e inseguridades, se aisló del mundo empresarial, recogiendo lo poco que le había quedado del dinero de su padre, se dio a la fuga de su ciudad natal en Oklahoma huyendo de muchos inversionistas que había estafado con sus malos negocios, quienes le habían declarado la muerte si se les volvía a cruzar en el camino.

Se instaló en la ciudad de San francisco, California. Haciendo una pequeña inversión cerca de zona montañosa, donde compro un pequeño taller de carpintería. Nunca imagino que pasaría de ser un gran empresario con un apellido reconocido en Oklahoma, a administrar un taller sencillo de carpintería en tan poco tiempo.

Richard de 30 años de edad luego de ser un mujeriego en su juventud deseado por muchas mujeres, se convirtió en un hombre solitario que solo vivía para su taller. Vestido con ropa de obrero raso, botas de goma, camiseta blanca, y pantalones verdes militar. Diariamente hacia maravillosas creaciones en madera y las vendía a diferentes personalidades e inversores de mediano estrato en el área de la mueblería.

Un día llego a su taller una joven de baja estatura, grandes ojos grises y hermosa sonrisa brillante, llamada Miley Parker. La joven comenzaba su carrera como guardabosques en uno de los Parques más importantes de la ciudad de San Francisco y buscaba encontrar una mesa de noche, para su pequeña habitación ubicada en las instalaciones del Parque.

̶ Buenos días, busco una mesa de noche para mi habitación.

Dijo Miley abriendo la puerta del taller de Richard, mirando a su alrededor en busca de una mesa color caoba de una altura moderada.

Richard que se encontraba en el cubículo de producción con un par de empleados, trabajando en la base para una cama, no escucho que alguien había entrado a la parte delantera del taller.

Miley al mirar que nadie salía atenderla, siguió caminando hasta el fondo del taller en donde pudo mirar a Richard, trabajando junto a sus empleados. Miley no pudo explicar la sensación al mirar a Richard por primera vez, sus grandes músculos contraídos, mientras lijaba la madera, aquel cabello pelirrojo rizado acompañado de un par de ojos verdes esmeralda.

Miley quedo deslumbrada pensando que había encontrado a un buen hombre trabajador, que tenía afinidad con su profesión de guarda bosques.

̶ Hola buen día, Estoy buscando una mesa de noche color caoba.

Dijo Miley abriendo la puerta del cubículo de producción, en ese mismo instante, el par de empleados se quitó los audífonos de protección contra el ruido de las pulidoras y lijadoras, y ambos golpearon el casco amarillo que tenía puesto Richard, señalando hacia la puerta en donde se encontraba Miley parada, luciendo un short beige, botas color marrón, camiseta blanca y sombrero de paja.

̶ Hola . ¿Qué tal?

̶ ¿Buscaba algo? .

Respondió Richard con cara de asombro y algo nervioso al ver a tan linda mujer dentro de su taller vestida tan particularmente, al instante comenzó a quitarse el casco, los audífonos, y los guantes de seguridad para atender a Miley.

Juntos caminaron hacia la parte delantera del taller, donde se encontraban algunas mesas de madera, como las que buscaba Miley.

Richard dijo:

̶ Estas de aquí están en oferta.

Señalando las mesas de madera color camel, con las patas acabadas en marrón oscuro, ubicadas a la derecha.

Miley dijo:

̶ Son bellísimas, Pero busco algo color caoba para que haga juego con las paredes de la habitación.

Richard dijo:

̶ Entiendo, entonces lo que te funcionara es esta de acá.

Señalándole una mesa pequeña color caoba intenso, ubicada en la esquina izquierda, apartada de todas las demás.

̶ Es perfecta me la llevo . ¿Cuál es el precio? .

Con gran entusiasmo exclamo Miley, caminando hacia la mesa tomándola con ambas manos.

Richard dijo:

̶ Es tuya, La llevaremos a tu casa ahora mismo.

̶ Muchachos ayuden a la señorita con la mesa por favor .

Con gran rapidez los muchachos, tomaron la mesa y la montaron en un pequeño camión de carga propiedad del taller.

̶ Esperen muchachos, aun no cancelo la mesa, no puedo llevármela así no más.

Miley les dijo educadamente a los dos empleados de Richard, deteniendo el trabajo de montarla en el camión

Richard dijo:

̶ La mesa es tuya. No necesitas pagarme con dinero, pero si aceptas una cita con este humilde carpintero, queda más que saldada nuestra deuda.

Acercándose a ella, tomándola de la cintura viéndola cara a cara.

̶ Eh... Está bien, supongo que no me puedo negar, ante tan grata oferta.

Respondió Miley, con voz titubeante, y conteniendo la respiración, de los nervios que le provocaba estar tan cerca de Richard.

Los empleados cargaron la mesa, a la dirección de la residencia de Miley, mientras que ella contaba las horas para verse con Richard de nuevo.

Llego el día tan esperado en que Miley se encontraría en una cita romántica con Richard, el reloj marcaba las 6 :30 pm. Miley terminaba su jornada turística en las imponentes secuoyas del Muir Woods Parking. Rápidamente fue a su habitación ubicada dentro de las instalaciones del Parque, se vistió elegantemente, soltó su cabello, dejo sus botas de seguridad para colocarse tacones color rojo, y pinto sus labios color cereza. Mirándose al espero se dijo así misma:

̶ Esta noche tendrás al hombre de tu vida frente a frente, Procura no meter la pata.

Mirándose aun en el espejo soltó un suspiro, tomo su cartera y salió camino hacia el taller de Richard.

Llegando al taller de Richard a las 7: 00 pm, puntualmente Miley noto que había un cartel en la puerta que decía:

̶ Cerrado, evento privado.

Con una risa en sus labios, Miley toco fuertemente la puerta del taller de Richard que al instante se abrió como por arte de magia, Miley miro hacia el fondo del taller, notando que todas las luces del taller estaban apagadas.

̶ Buenas noches . ¿Richard estas allí?

Dijo Miley, mirando hacia el piso del taller, rodeado de pétalos de rosas rojas, camino hacia el cubículo de producción, en donde había una mesa con un mantel color dorado, decorado con pétalos de flores y dos sillas alrededor. Miley sorprendida por tanto detalle a su alrededor, se sintió como una princesa en un cuento de hadas.

Se sentó en una de las dos sillas, al instante Richard con una rosa roja, toco el pronunciado escote en la espalda de Miley suavemente.

Y dijo:

̶ Hola, espero no incomodarte con este humilde gesto.

Miley dijo:

̶ ¿Incomodarme yo?.

̶ Estoy maravillada con tantos detalles, espero esta noche sea inolvidable.

Finalizo Miley, mientras miraba a Richard sentarse a su lado.

̶ ¿Te gusta la Pizza?.

̶ Hace años es el menú de mi preferencia, con tanto trabajo en el taller apenas me da chance de comer .

̶ Era el plato favorido de mi madre, cuando era pequeño ella lo cocinaba todos los domingos.

Dijo Richard mientras agregaba salsa de tomate alrededor de la pizza.

Miley dijo:

̶ La pizza es deliciosa, me encanta la pizza, tampoco me da mucho tiempo de comer entre las jornadas turísticas del parque y el mantenimiento de las áreas forestales .

Tomando una ración de pizza con una servilleta en sus manos. Mientras una gota de salsa de tomate goteaba de su labio inferior.

Richard mirándola con ternura tomo una servilleta se acercó al rostro de Miley y delicadamente limpio el rastro de la salsa en su labio, Miley mirándolo románticamente contuvo su respiración por un par de segundos y luego sutilmente desvió su mirada hacia el pasillo del taller. Richard sonrió a carcajadas, y dijo:

̶ Cierto ja jajá.

̶ Trabajas rodeada de orangutanes todo el día, de seguro ellos roban tu comida mientras duermes.

Llevando un gran trozo de pizza a su boca.

Miley dijo:

̶ Muy gracioso, los animales están en los zoológicos no en los parques, creo que tu comes como orangután, de seguro hueles como ellos luego de lijar madera todo el día.