Madison Miller es la secretaria de un importante CEO, al que todos temen; llevando una vida aburrida, dedicada al trabajo y anhelando obtener el amor de un hombre que la mantiene en la incertidumbre. Su vida cambiará completamente tras una aventura de una noche ¡Con su jefe!. ¿Que pasara ahora y como van a lidear con las consecuencias sin convertir su vida en un completo caos?.
Caminaba de un lugar a otro, presa del nerviosismo; podía sentir mi corazón latiendo acelerado y nunca en mi vida 5 minutos me habían parecido tan largos. Sobre el lavamanos reposaban 5 pruebas de embarazo en espera de un resultado.
La alarma sonó, sacándome de mis oscuros pensamiento y sobre saltandome. Respire profundo antes de tomar la primera prueba.
Positivo.
¡Oh por Dios!, Podía ser un simple error ¿Cierto?, Quizás estaba muy cansada y estaba alucinando. Tome la siguiente prueba, conteniendo la respiración.
Positivo.
Quería gritar pero respire profundo antes de tomar la siguiente prueba; encontrándome con el mismo resultado... Al igual que las otras restantes. Una prueba postiva podría ser un error pero cinco jamás lo sería.
Me recosté de la pared y me deslice hasta el suelo mientras las lágrimas brotaban de mis ojos sin poder contenerlas. ¿Que iba a hacer ahora?. ¡Por Dios!. Todavía tenía una vida por delante, apenas tenia 24 años y en mis planes no estaba tener un hijo. Ni siquiera sabía que rumbo tomaría mi vida y ahora tenía que hacerme cargo de alguien más...
Esto no podía estarme pasando a mi... ¿Que pensaría Samuel?, ¡Oh por Dios, Samuel!... Había estado enamorada de él desde que estábamos en la universidad, había prometido dar una respuesta a mis sentimientos cuando regresará del servicio militar y yo había prometido esperarlo. ¿Cómo es que ahora me encontraba en esta situación?. ¿Por qué había roto mi promesa de esperarlo si yo lo amaba?.
Como un flash el recuerdo golpeó mi mente, era una noche del viernes; mi jefe Nicolás Strauss había estado bebiendo en su oficina y yo había tratado de convencerlo de que se fuera a casa cuando él me invitó un trago y no pude decir que no. Gran error.
Lo siguiente que supe fue que desperté en una cama desconocida con unos fuertes brazos rodeando mi cintura sin recordar nada. En ese momento quería morirme, al momento en que mire sobre mi hombre y me encontre con el rostro de mi jefe. Habiamos pasado la noche juntos... Y aquí estaba enfrentandome a las consecuencias de mi estupidez.
¿Que voy a hacer? Era lo que me preguntaba una y otra vez, ¿Debería interrumpir el embarazo? Si lo hacía Samuel no se enteraría de nada y podríamos vivir por fin nuestra historia de amor, esa por la que tanto había luchado. Pero ¿Sería realmente así?, ¿El realmente me amaba?, ¿Y si al final de todo decidía rechazarme?. Pero había hecho tanto por él... Lo amaba desde el instante en que mis ojos se cruzaron con los suyos, habíamos compartidos buenos y malos momentos... Y cuando finalmente había una esperanza para nosotros ocurría esto...
Las lágrimas corrían por mis mejillas sin poder contenerlas y sinceramente ni siquiera quería contenerlas, mi corazón latía muy fuerte y en ese momento solo quería que me tragara la tierra. ¿Debía decirle al señor Strauss?, ¿O por el contrario debería tomar el asunto en mis manos?. Sino se enteraba de lo que estaba pasando no ocurriría nada ¿Cierto?
Mire la hora en mi celular, debatiéndome si debería llamarlo o no, era casi media noche. ¿Se vería muy mal que una secretaria llamara a su jefe a tales hora de la noche?. Una parte de mí me decía que tomara una decisión, que podía lidear con esto y así no arruinar su perfecta vida pero otra parte de mi me gritaba que no podía hacer eso, que tenía el deber moral de informarle de lo que estaba pasando.
Me moridi el labio inferior sin apartar los ojos de la pantalla, nosotros no éramos amigos, nosotros ni siquiera teníamos un vínculo más allá de lo laboral, él era arrogante; siempre mirando a los demás por sobre el hombro, siendo superior a todos al ser el presidente de una compañía tan importante como la suya. ¿Cómo reaccionaria al descubrir que una secretaria insignificante esperaba un hijo suyo?.
Él era un hombre totalmente fuera de mis alcances, si había existido una noche entre los dos se debió simplemente al exceso de alcohol en nuestros sistemas. Era imposible que alguien como él se fijará en alguien como yo. Y yo jamás hubiera tenido una noche loca con nadie cuando estaba completamente enamorada de alguien más...
Suspiré mientras marcaba su número, no tenía su contacto personal por lo que marque al número de trabajo, sonó el primer tono, cuando el arrepentimiento me golpeó y estaba apunto de colgar escuché su voz del otro lado.
- ¿Si? - una simple palabra pronunciada con su profunda voz seductora fue más que suficiente para que mi corazón diera un vuelco total y latiera acelerado, como si quisiera escaparse de mi pecho, agradecí estar sentada en el suelo o de los contrario mis piernas no hubieran sido capaces de soportar mi cuerpo por la forma en que temblaban.
- He... Señor Strauss, soy Madison - guarde silencio sin saber que más decir, mi mente estaba en blanco sin saber cómo abordar el tema.
- Se que eres tú. Dime ¿Ocurre algo? - preguntó con voz firme, podía imaginarmelo frunciendo el ceño, mal humorado como siempre.
- Señor... Yo... Queria... Necesitaba... He - estaba tan nerviosa que las palabra se atoraban en mi garganta, mi mente perdida, fuera de si y no lograba pronunciar una frase coherente, había pasado un mes desde nuestro encuentro y ambos habíamos acordado no hablar al respecto, ni siquiera me moleste en decirle que esa noche había sido el primer encuentro para mí. ¿Que le importaría a él haber tomado la virginidad de su estúpida secretaria?.
Lo escuché suspirar - Señorita Miller, este es el número de trabajo... Si no es importante es mejor que hablemos en otro momento - me sugirió de manera pausada pero con tono firme.
- ¡No espere! - grite presa del pánico ante la posibilidad de que me colgará el teléfono y no poder decirle lo que estaba pasando, me había desviado de mi objetivo a causa de los nervios que me consumían por dentro - Estoy embarazada - dije casi en un susurro y temia que no me hubiera escuchado.
- ¿Que? - pronunció en un tono más despierto.
- Estoy embarazada - repetí y en ese momento sentí que todo se me venía encima una vez más, las lágrimas comenzaron a brotar nuevamente y sentí que colapsaría en cualquier momento. Solo podía sentir miedo por la respuesta que ese imponente hombre me daría.
Eduard Carbajal, era un hombre humilde que se había esforzado mucho para salir adelante, con el corazón roto y un profundo rechazo hacia las personas de alcurnia; gracias a su tormentosos pasado. Su vida dará un giro de 180 grados el día de su graduación, cuando Helena Bomparkt aparece ante él, imponente y muy segura de si misma ella llegara para poner su mundo de cabeza. ¿Pero que se oculta detrás de su repentina aparición?, ¿por qué ahora después de tantos años ella regresa a él?. Su pasado y su presente se juntan, dejandolo con un futuro incierto, no está seguro de que curso de acciones tomar pero si de algo está seguro es que nunca más caerá en los caprichos de la familia Bomparkt, ese que no había hecho más que arruinarle la vida.
Monserrat Harrison pensaba que vivía una vida perfecta, tenía un trabajo estable, un amoroso novio y estaba apunto de contraer matrimonio... pero su vida perfecta se ve arruinada cuando estando en el altar, apunto de dar el "si acepto", su prometido la llama por el nombre de otra mujer dejando al descubierto su infidelidad y su amante era nada más y nada menos que ¡La mejor amiga de Monserrat!. Con el corazón roto y sus sueños hechos añicos, Monserrat abandona la recepción, dándose cuenta que justo en la habitación de al frente se está llevando acabo otra boda, en la cual decide ingresar y admirar el amor de los novios; ese amor que ella acababa de perder tras descubrir la traición de su prometido. Pero no todo es tan perfecto como parece, la novia de aquella ceremonia declara su amor a otro hombre, huye con su amante dejando al pobre hombre solo en el altar enfrentándose a los murmullos de los invitados. Por lo que en un repentino ataque de valentia, impulsada por los efectos del alcohol y sus sentimientos, declara su supuesto amor a ese hombre, pidiéndole que se case con ella. Sin imaginar todos los problemas que ese simple acto traería consigo... lo que comenzó como una mentira y una acción impulsiva se convertirá en un completo caos cuando descubra quien es su nuevo esposo... un matrimonio que se suponía sería una mentira termina siendo real y arrastrándola a una divertida aventura con un total desconocido que pondrá su mundo de cabeza. ¿Monserrat decidirá poner fin a ese falso matrimonio o podrán surgir sentimientos que lo impidan?.
La vida da muchas vueltas ... Nos sumerge en un espiral se experiencias con las cuales sufrimos, lloramos, reimos. Experimentamos miles de emociones en un momento, nuestra vida se puede poner de cabeza de un segundo a otro o por el contrario se puede transformar en el más hermoso cuento de hadas que podamos conocer. La vida de Mónic dió muchos giros inesperados, desde que aquel hombre de enigmática mirada gris apareció en el bar CopaCabana. Nunca imagino que ese hombre de la barra, con los ojos llenos de tormentas cambiaría su vida para siempre... El más hermoso cuento de hadas que poco a poco se transformó en pesadilla. Dominick Carbajal la llevo al cielo, enseñándole a amar, curando su alma herida para luego bajarla al infierno, dejando solo un corazón roto; una herida mortal muy difícil se sanar. ¿Podrá el amor triunfar sobre las tormentas que lo azotan?. Es difícil olvidar cuando se a amado con demasiada intensidad y se llega a odiar con la misma fuerza. Porque a veces el amor no es suficiente para sanar un corazón roto que ansia venganza. ¿Que hacer cuando se está atrapado entre dos emociones intensas?, guiado por un corazón confundido, ¿como tomar una decisión?... Que difícil era estar atrapada entre el perdón y la venganza, cuando tú corazón ama con gran intensidad pero tu mente no es capaz se perdonar la traición... Decisiones difíciles de tomar, situaciones complicadas de enfrentar; porque es difícil apaciguar un corazón que ansia venganza y la vez tiembla de deseo, de amor. Sentimientos encontrados, amor y odio; deseo y pasión; alegría y tristeza, emociones que se contraponen pero que albergan un mismo corazón, ¿cómo saber que camino tomar cuando se está atrapado entre el perdón y la venganza?, la decisión más difíciles de su vida estaba a punto de ser tomada y aún no sabía si seguir a su corazón o su mente. Esa era una respuesta que solo ella misma podía encontrar, ¿Cederia ante el encanto de esos profundos ojos grises? solo había una forma de averiguarlo...
Dicen que el primer amor siempre es el más significativo, ese que nace de pronto y casi sin darnos cuentas, es ese que hace latir nuestro corazón de forma acelerada y es el que no conoce de motivos, de estatus o edades. El primer amor no es esa relación que te robó la inocencia, no es eso que se cree sentir en una época de enamoramientos fríos y sin significados. Es un amor puro, que te hace cometer locuras, es aquel que puede permanecer oculto en el silencio y aún así crecer día a día, es ese al que te une tu hilo rojo del destino y con el que quizás jamás podrás estar. Es ese que marca tu vida para siempre y que permanece en tu memoria perdurando en el paso del tiempo, es el amor más puro y real que puede existir. Es ese que permanece aunque ya no estén juntos. El que te hace dar cuenta que desprender más energía peleando con alguien que amas que haciendo el amor con alguien que quieres. Vanessa Fullbustter conoció ese amor en el instante en que sus ojos se cruzaron por primera vez con los de su profesor, supo desde el primer momento que ese hombre de profunda mirada gris era su otro lado del hilo rojo del destino pero también supo de inmediato que era un hombre prohibido, un amor destinado a vivir oculto en los confines más oscuros de su consciencia… Sabía que no había vuelta atrás, que su corazón latía más rápido por él, que sus sentidos se nublaban al tenerlo cerca y que la calidez de amar crecía dentro de su pecho; calidez que era opacada por la frialdad de unas palabras profundas, de una mirada indiferente y de un amor que jamás sería correspondido. Sin imaginar que por azares del destino ella terminaría siendo la favorita del profesor… Porque aunque ella había decidido callar su amor, la vida tenía otros planes para ellos…
Melissa podía tolerar ser engañada y humillada; pero si la acusaban de algo injustamente, sería una historia diferente. A los ojos de su esposo, tres años de matrimonio eran menos importantes que una simple lágrima de su amante Arielle. Y finalmente, él la abandonó sin piedad en un día lluvioso. Cinco años después, Melissa reapareció con sus adorables gemelos; esta vez, se convertió en una médica de fama mundial. Fue entonces cuando su exmarido, Everett, le pidió que ayudara a Arielle... "Abuelo, si quieres hablar con mamá, primero tienes que pasar una prueba". El hijo pequeño de Melissa, Merrick, levantó con orgullo la barbilla. "¿Abuelo?". Everett se preguntó si parecía tan viejo. "Papá, sí eres muy viejo... ", dijo Lindsey, la hermana gemela de Merrick con un puchero.
Ana ya no recordaba lo que era dormir en una cama o estar bajo un techo que te cubra del sol o la lluvia. Los restos de basura eran su comida diaria, de allí también vestía. Como único podía sobrevivir era con la ayuda de algunos hombres que la visitaban algunas noches, en busca de placer. Todo lo que hacía era por su pequeño Tom, el niño que se había encontrado abandonado en la basura. Siendo extrajera, sin familiares ni amigos, solo la promesa de un amor que luego se marchó dejándola tirada, no tenía cómo sobrevivir. Pero ella y Tom harían todo lo posible por mantenerse con vida, en este vil mundo que solo les había traído tristeza y desesperación.
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
Jenna Murphy se había casado con Hansen Richards, el hombre al que amaba desde la infancia pero el que más la odiaba. Ella creía que él finalmente la amaría. Pero antes de que su sueño se hiciera realidad... Un accidente automovilístico terminó con la vida de su padre y llevó a su madre que estaba entre la vida y la muerte en la unidad de cuidados intensivos del hospital. Su descarado y codicioso tío aprovechó la ocasión y les robó todas las propiedades. Para conseguir los honorarios del cirujano que atendía a su madre, Jenna solo podía estar de acuerdo de divorciarse de Hansen. Pero Hansen la invitó a la fiesta de cumpleaños de su abuela tratando de salvar su relación. Sin embargo, Jenna encontró algunas pistas que mostraban que el accidente automovilístico que arruinó a su familia tenía alguna relación con Hansen..."" "
Amar y ser amada es lo que toda mujer sueña. Sin embargo, lo único que Debbie quería era el divorcio. Llevaba tres años casada con Carlos, un joven multimillonario a quien ni siquiera había visto la cara. Cuando por fin decidió poner fin a su irónico matrimonio e ir en busca de la felicidad verdadera, apareció su supuesto marido y le pidió que lo intentaran de nuevo. A partir de entonces, Carlos se sentía increíblemente atraído por el espíritu libre y salvaje de Debbie y se enamoró de ella. Él comenzaba a mimarla. Poco a poco, lo que había entre ellos se iba a convirtiéndose en una atracción irrefrenable. Esto es una extraordinaria historia de amor donde descubrirá que, a veces, el amor no está muy lejos de cada uno de nosotros.
Carolina Navarro fue obligada por su padre a casarse con un hombre desfigurado para salvar a su familia de la ruina. Maximo Castillo tenía todo lo que cualquiera deseaba, hasta que un accidente aéreo destruyó su cuerpo, su alma y su relación, haciendo su vida desesperada. Sin embargo, independientemente de eso, todavía necesitaba una esposa y un heredero. ¿Podría funcionar un matrimonio entre estas dos personas? ¿Sería solo un matrimonio de conveniencia o crecería el amor entre dos almas heridas?