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Historia

Capítulo 4 ¿Quién es él

Palabras:3427    |    Actualizado en: 13/02/2024

ssa

or a la parroquia ralent

ía, buscando acercarme

eri

, siguiendo sus pasos a

roq

ndo las palmas de la

en la institución, y pode

eguir es

en como el resto de

oquia y minutos después

ecc

acercarte al consejo, ah

dome a entender que no ser

r terminada l

El domingo es el cumpleañ

isitas, pero me gustaría

za gacha. No era sumisión

la vista notando su se

taba pidiend

en clausura justamente pa

regarnos por completo al

uizás le haga falta rezar

larga explicación

reglas y que necesi

las órdenes de los superi

a vio

te! Sé muy bien que

al confesionario y con

hace ser rebelde —senten

el camino para que ent

miné hacia adentro. Cami

mi cerebro se encargaba

ía a mirar a mi derecha

él. Me detuve en mi luga

rte indignada de mí que

e no tenía der

ascurría

a en mi cabeza como para

me hace quedarme clavada e

Jayden ya no estaba,

ién. Los presentes miraban

a misa, el murmullo se hi

a salir hacia e

pasando? —mur

r y yo no tardé en hacerl

al. Súplicas desesperadas

u pánico en cada exclamac

e: de rodilla a una mesita

ada por uno de los decan

a mantener la cabeza pega

dido con la intens

o que sollozaba con pavor

rando el momento oportuno

para amputarle la man

co la escena pero nadie

la madre

ró airoso al g

o derecho te hace desobe

der una parte del cuerpo y

que haces con tu mano de

Es mejor perder una parte

erno. Mateo 5: 29-3

pilas empapadas y los lab

un castigo» ¡Qué clase

ntraron con aquellos ojit

o silencioso sup

ía dando su disc

ir en desacuerdo cuando

ayden, el pudo leer mi in

dvirtiéndome que me alej

éndose de mi c

e la madera acompañado de

rvatorio. Varias de las m

ojos sintiendo cristales a

ento pesado sobre mi estó

as se doblaron tambaleán

estructiva repleta de in

latigazo de ira que me az

os ojos: una mano colgada

ando como la lluvia en

ue mi campo

una mano a la boca y ret

s, corrí encerrándome en m

ada a mis rodilla, trau

ado pa

minutos, una hora… ¿Dos?,

piernas se acalambrara

hizo levantar la cabeza.

e pensé que iría y a

ma y no se molestó en dis

chupado la sangre se ac

. Creo que ni n

ando con mis dedos en si

preocupada si estuviera e

sto terminará sien

si se enteran de mi sit

o, meciéndose y la

. Sabía que mi comentar

staba tra

me

yudarme, ¿ver

ió calmarla y se

buscaba dice que debes

dose más con las sábanas—.

dije que no m

en direcció

o estresarte de más —di

ebería aplica

la misa ya había terminad

como si nada. Entreabrí l

los tantos cubícul

entanilla y esperé en sil

y yo hice la s

e he pecado. He querido

amilia y saber de ellos, e

do esto ridículo. Ya no

de

onstantemente, es impos

tivo por el cual rezamos

ensamiento o acto impuro,

a pausa—. Reza 3 padre nu

de dormir, yo pediré por t

uedes i

é. Saliendo al jardín cen

eca donde me correspondí

zona “B" donde un chico

tra fumando un cigarri

por qué me sigo sorpren

pasos

mi? La chica del pasill

enta

ándole una calad

trato de

r tu amiga, pero me har

ico que ando buscando. —Él

r, anoche parecí

dispues

Las reglas están para rom

cementerio, debes aprender

—lo último sonó

det

iona esto, trato de no se

me ha visto entrar pero q

erie, im-

bo de decir, debes sabe

gl

M

izó des

buscas?

ay

e alzaron c

e a él —instó empezan

or

da ser tu amigo —un to

s movimos por un pasill

iones más estre

sicópata?

zo gracia, simple

aquí, suele estar cerca

te a la puerta

uera?, en medio del pas

—pronuncié

ntó alejándose, alzando l

ma no

illo. Por curiosidad hi

abierta, aunque por el d

ividual. ¿Por qué los hom

s so

acomodada, tenía más priv

ande y moderno. Una estan

mpo lleva aquí para

la abrí ¡Un baño!, nadie

presumía de una tina. Cer

l primer cajón lucia una

, Rolex,

e roba la

haces

el cajón con fuerza ll

yd

me m

. ¿Qué haces aquí y qué b

aja

tándome en la cama—. ¿Por

a todos por igual —siseé

e ser más

norando mi

recibir visitas —confiesa

n el colchón—. ¿Por

ue vi anoche vuelve y f

o me sentía cómoda. —

ció el

lo, mientras me la cogía

álido cerca de mi mejilla

to, mi indignación disminu

eé al oído una a una toda

que me las haga. Pero me r

confundida y no sé lo que

mpleto», me gr

ayden, quiero… —Me calla

uello se inclina ofrecié

hormigueo invadiendo mis

o respirar como u

eé, para que

co, y sus labios despla

de desmangar mi sotana,

mi cuello. No soy

ber que voy a desflor

tir usada para un único f

y eso le hace levantar l

ia, pero él solo m

sexo, no estoy aquí por

eren acostarse contigo? —

os. Aunque soy consciente

do plano y m

ul grisáceo de tus iris

ás sensual, no importa s

e te preguntas por qué m

ro, explotando la última

mado entr

os puesta en su torso, hi

ncor

proponerme que en la noc

puerta dos y

caer en el colchón con

lmohadas, contemplándome

ciéndome u

norando porqué me sie

mujer que estuviera en mi

segura, y que esto parece

ea que

s se practica sexo, ya

, pero si quieres que te

i

n no me recupero de sus

y su propuesta de ir

o de siempre

os labios

23:00 tengo cosas import

có frunciendo lig

un intento por ha

? —al fin sal

asi

erio? —vuelv

un gesto de

al contarme esto, q

ura, en un tono de

o, luego me doy cuenta de

o de Sofía—. Bien, tampo

a sentar a su lado. Nos

iento su mirada q

iro, en su cara tiene un

tinúa…—. Es una amiga, ti

embar

e alarme o algo, pero m

i

ayudarla

ceño y se

N

Qu

udarla en eso, n

rla, ¿por qué no lo

, demasiad

me! —o

ha

ojos

subo la vista de s

s habla

con la

¡a nadie! —eso fue una

dome parpadear varias vece

mpleado, como si

¿a qué es

un i

o

y el orgullo que me qued

e que nadie me viera sa

hasta la

parecieron iluminarse. Me

cer me

más de medio día

y en unos días te avisa

anta Clara —explicó una h

xamen de

rada en el mostrador y l

is

se encontraba del otro

er mayor de rasgos asiáti

entud fue una mu

entó guardando la hoja

celda, dejé el carnet e

ía quien le

a se persignó y posó sus

nsé que me ayudaría, no le

era sé por qué creí que m

una especie de mundo par

ie

l vez

an llenos de pánico, dá

la conversación qu

! ¿Qué voy hacer? —lam

earse de un lado a otro c

uila S

eres tu la que estás

con un ded

í el

to de ayudarte pero te r

ien le abrió las piern

mirando hacia la puerta.

entar en su cama y

ás me

ayudarías —rep

acerlo —matic

ó limpiándo

toca trabajar en la cocin

me miró angustiada—. Bus

aza y alcohol del botiquín

s se corta, y

ón!? —e

rrodillándo

r f

causarte una infección,

que mueras, no tengo ide

go, rotundame

hacerlo solo

iado. —Resoplé poniendo

ativa—. Dame unos días, qu

ayu

ntió int

a, trataré de buscar un

pasa algo me c

ico, pero la verdad es

a, al menos no hoy, esta

Jayden, quiero saber a

ter

ciando la cena. A un paso

va Jayden o de meterm

m

la asintió

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