ía del Valle,
común, viviendo una vida modesta, ocultando mi imperio, TecnoFutur
urraba al teléfono, mencionando a Ricardo, u
e había "arreglado" una compañía especial para la noche, u
tino me tenía preparada la escena más dolorosa: Sofía, mi Sofía,
ínez tuyo", dijo una de sus amigas. "Tú mereces
, Sofi, pronto todo esto será solo un mal recuerdo. Yo me haré cargo de
ros ojos se encontraron; su pá
ndo aquí? ¿Acaso me estás siguiendo?
tos mucho más serios que seguirte por clubes nocturnos", respondí, m
¿Sería Sofía, mi esposa, la "compa
a, mi abogado te contactará. Quiero el
de lágrimas. "¿Qué es todo est
una reunión con el
do y sus amigos
s más locos. El señor Montemayor
la mirada,
¿Un mentiroso?", le dije, rogándole un
a n
do... ¡y tú me acusas a mí! Y luego inventas est
a maldita verdad!", grité,
así", suplicó ella, con su voz
migos me llamaban 'godínez'. ¡Y lo peor de todo, vi en tus ojos que estabas de acuerdo con e
y un tipo gordo se in
ordo vino
muñeca, y su cara se e
CR
omó, inc
ste? ¡Detente!", gri
guridad! ¡Agarren a este anim
a los g
Ricardo. "Tú ere
se int
Lo vas a matar! Discúlpate, pídele pe
apa
una última oportunidad, Sofía. Elige. O te quedas con este payaso y su mundo de apariencias, o vienes