mujer a la que le agradecí por salvar a mi esp
cómico que una risa histérica brotó de mi pecho.
ra un peso físico, pero debajo de él, algo n
anzar un balón de fútbol americano. Casandra estaba sentada en una manta cerca, observándolos con una sonrisa sua
ristal, conteniendo la rabia. Tod
rojado con un brillo saludable. Me rodeó la cintur
un gran lanzamiento. Javie
l. "Justo estaba pensando en eso", dije,
e a encontrar sus ojos. "Cristiá
a pregunta al azar. "O negati
es el de
ivo, por supuesto
cticada. No tenía idea. Realmente
con el ceño fruncido por una falsa preo
ntiroso rostro. En cambio, forcé una pequeña
diera verlas. Mi mente repetía las palabras de la enfermera. A posi
nico comentario casual, podría haber pasado el resto de
un mandado", dije
levarte"
de lo que pretendía. "Necesito
grandioso y vacío para apoyar la carrera que había abando
Fui directamente a
do, su expresión
n momento, me permití
ciar de él", di
né. Engañar es una cosa, pero esto...". Se interrumpió, s
las palabras sabiendo a
Cristián era el esposo perfecto. El hombre que celebra el día de l
pública impecable, el esposo cariñoso,
rrado con llave y sacó una carpeta g
tima página, estaba la firma segura y fluida de Cristián justo debajo de la cláusula d
susurré, mis dedos
ueron asaltados por el olor a vainilla y azúcar. El comedor estaba
de varios pisos que parecía de boda. Una vez más, se había exced
nto te encanta el matcha, así que le pedí al pa
la tendió, el esposo perfecto y
irme, y forcé una sonris