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Historia

Capítulo 3 VALET

Palabras:3038    |    Actualizado en: 26/08/2021

se escucha aquel nom

ras subiendo a la plataforma para recibir su título. Estrechó la mano de los maestros quienes le susurraban algo con una sonrisa y

irada, y al encontrarme entre la demás multitud, una sonrisa se dibujó en su rostro. Le sonreí

to me levanté de mi lugar yendo directo a buscar a Nate. Cuando lo vi a lo lejos corrí entre la gente con cuidado de no em

e emocionada abrazándolo mi

a ella para invitarla a salir —dijo mirándome con una sonrisa después tomándome del mentón—. Pero me ha ah

ndole el birrete el cual ya se ha

ia él dejando un rápid

cosa —dijo al separarse quitándose la tog

espués de colgar de la túnica en su brazo en el mismo que sostenía el título. Caminamos fuera del lugar

a cajuela para abrir esta y meter ahí el birrete y toga

en automático ambos miramo

os claros. En su brazo colgaba una toga y en su mano s

lo vi sonreír mientras cerraba

s soltando una risa. Entonces él era Lucas. Si no mal recuerdo

ijo el chico sin poder ocultar la

e por la cintura atrayéndome

a a mí y me dedicó una sonrisa algo sorp

ealmente estás segura de querer estar con él? Es decir, hay mejores opciones —me miró d

i como Nate sonrió y casi después lo fu

esta es mi opción —le seguí la broma a lo que esta vez fue el quien carcajeó

a vez mirando a Nate—. ¿Ir

cir Nathaniel pero d

do el brazo de Nate y casi

Este chico se ha perdido de muchas buenas fiestas,

s, definitivamente estaremos ahí —volví a son

oche —dijo el rubio sin borr

a corría hacia él y lo abrazaba casi haciéndolo caer tambaleándose. Sonreí, miré a

me dijo tratando de parecer ofendido p

, ya sabes —dije encogiéndome d

haba más, no pudiendo ocultarla. Tomó mi rostro entre sus

única en algún momento —dijo sobre mi boca sonrie

onces —seguí el juego dici

e comeríamos para celebrar. Ese día solamente celebraríamos el logro de Nate, porque po

nos —dijo Nate colocándose detrás de mí

lo rápido y después inclinándome a

e lo que haríamos los próximos días. El verano había llegado y con él las vacaciones. Oficial

e por detrás rodeando mi cintura

o mientras lo miraba por el espejo y e

e que te convenza para quedarnos —me bes

Verás que te divertirás —le miré de nuevo por el es

espués en la curva de mi cuello. Su brazo alrededor de mi cintura me acercó más a su cuerpo hasta dejar por completo mi espalda presionada sobre su pecho. Su mano se deslizó por mi abdomen y vientre, viendo por el espejo com

ue me hacen divertirme —murmuró con voz ron

o, su mano cada vez más acercándose a una zona prohibida, su boca presionada contra

mecer y casi temblar sin poder evitarlo. Sonrió notando la reacción de mi cuerpo y me maldije en

ue te hice ayer —volvió a pr

vi sus intenciones, pero insistió en que simplemente me relajara. Lo hice. No había duda de que hizo explotar cada poro de mi piel haciéndome llegar al clímax de una manera fantástica, incl

o es que fuera una santa que no sabía como se hacía un oral a un hombre. No era algo que hubiese hecho antes, pero por supuesto que me informaba. Aparte que Cassie en ocasiones me contaba sus aventuras y experiencias con sus amigos con derecho

amente por debajo de la tela escarlata del vestido. Me acariciaron con las yemas mientras me se

mento me giré sobre mis talone

a después viendo como la diversión se asomó en estos. Aquella diversión que había aprendido a reconocer en

labios chocaran presionándose el uno contra el otro y comenzó a besarme. Mi cuerpo reaccionó de inmediato, besánd

re estas jalándome de nuevo hacia él chocando su pelvis con la mía. Casi jadeo sobre su boca de no ser por que nuestros

erme en no arrancarte el vestido —apenas

s manos ya estaban sobre su pecho y abdomen tocando por encima de la tela de su camisa justo sobre su torso. P

ciendo maravillas con su lengua. Dios, así yo no podía contenerme

ón pesada y jadeante y como pude presioné mis manos en su pecho tratan

ije con la respiración agitada

rió divertido volviendo a ac

. Estoy besándote —dijo con esa sonr

ero aún sentía la electricidad que se h

a punto de mandar todo al diablo—. Me estás trata

acarició los muslos con las yemas de sus dedos y después se apoyó sobre e

iero besarte, con ese vestido te ves jodidamente sexy y me es imposible no querer hacerte todas las

desordenándolo inconscientemente. Sus ojos me miraban aún con diversión, su boca ligeramente entreabierta

ueco entre mi rostro y pecho, besándome el cue

Te apuesto que nos entretendríamos más aquí que allá —su man

que nos quedásemos, lo volví a empujar. Se alejó de mí gruñendo y salté del l

iré con los ojos entrecer

de bufido y se recargó en la pared del baño.

a la vuelta, tomaba mi botiquín de maquil

era de la habitación y des

n —lo escuché decir mientr

s que ir —coloqué el

debe de decidir si vamos o

a de la noche es ir —dije esta vez subiéndome d

spejo del botiquín mientras sacaba de nuevo el brillo para labios—. ¿Qué e

nfundido. Se había detenid

llaje, así no puedes venir con tu calentura a distraerme aq

e brazos aún en el mismo lugar. Giré mi rostro para mirarlo. Me miraba con una sonrisa burlona y d

e a mí y se inclinó apoyando sus manos sobre el bo

nto. Así que el que estés encima del piano no hace ningún cambio a mi intento por provocarte, incluso me parece excitante imaginar la escena de mí follándote sobre el in

bio superior y después de volver a mirarme a los ojos se separó. Aún con la sonrisa en su ros

te anonada de las palabras de Nathaniel que definitivamente me habían descontrolado por completo. Sentí calor. Las ganas

de concentrarme solamente en las luces tratando de olvidar las palabras de Nate antes de que mis impulsos me gana

os? —escuché su voz y

ugaba con las llaves del auto en su mano dándole vueltas a estas. Aún llevaba el traje, sin corbata y sin saco. No importa

a que pudiese provocarme de tal m

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