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Historia

Capítulo 4 NATHANIEL

Palabras:3717    |    Actualizado en: 26/08/2021

la casa donde Lucas vivía, era una casa que sus padres tenían para rentar. Sus padres eran abogados, por lo que tenían la posibilidad de tener u

volumen, había personas dentro y fuera. En el jardín y la entrada la gente bebía y reía. Incluso

el auto a unos cuantos metros lejos para evitar que

padres —dije quitándome el c

asa? —pregun

ras no sea rentada Lucas puede hacer sus fiestas y reun

pués mirándome—. ¿Estás lis

y que regrese al apartamento —me acerqué a besarla con mi ma

ña risilla nega

iró sonriendo y antes de que pudi

después acercándome a Valet. Me miró y se acercó a dejar un beso en mi m

ijo emocionada mientras comenzábamos

una larg

bida Perla Negra? —me pregunt

sabor? —le dije pasando

melo—. Tienen en la barra de la cocina a un bartender

so y di un pequeño sorbo a este esperando a saborear la bebida. Asentí—. Lo tiene.

sa y después dio un sorbo. Al saborea

nriendo volviendo

estaba infestado de gente. Había rostro que reconocía, había otros que no. Algunos e

de mirarla sin dejar de sonreír. Cada una de sus facetas me dejaba encantado, entre más ti

por encima de la m

e venía Lucas con una bebida en la mano, al llegar hasta mí m

ijo casi gritando para que lo es

si me arrastran —rodee lo

í hacia Valet, que a

esta se encogió de hombros con una sonrisa victoriosa—. ¿S

mil veces —dijo mi chica sonriendo

a estaba algo tomado, pero segu

en el hombro—. Ni se te ocurra dejarla ir, hermano

y asentí apret

haré —le dije y es

están apostando una botella de tequila —d

persona que se le cruzaba. Sonreí negando después mirando a Val

r? —me dijo co

hacerlo en un lugar lleno de gen

me dio un leve g

e fulminó con la mirada—. Me refiero a beerpo

le dije tomándola del mentón incliná

en sus labios debido a la bebi

Anda vamos —me tomó del brazo y me jal

gente en la piscina, algunos en ropa, algunos en ropa interior. Había dos mesas del otro lado donde chicos jugaban beerp

eron de jugar? —di

alet me fulminó

é —dijo m

a —dijo Lucas mirándola, per

ojos mirándome casi retándome. Sonreí y negué.

que tanta suerte me traes —

locándose a la par de Lucas con la emoción expl

reguntó Lucas mir

n no? —preguntó Val

me miró a mí y

reí orgulloso mientras me cruzaba de

r —dijo casi obvio mientras da

as le daba. Aunque ella le había dejado en claro que sabía como jugar, le dio unas cuantas indicaciones con las que ella solamente a

n la misma universidad; graduados también, pero de otra carrera en la cual tenían algu

que porque tu pareja de juego es una chica te vamos a dejar ganar. Lo siento, hermosa, per

on ella, si hubiese podido ya estuviesen tres metros bajo tierra. No intervi

y el gato te haya comido la lengua —dijo mi chica y

ual mirando a Va

uda chica tienes a tu

se había quedado sin palabras por unos segundos, pero después sonrió tra

s —dijo el mismo

ta en dirección al otro lado de la mesa. La pelotita no cayó dentro, pero si rebotó haciendo

recía haber entrado en guerr

a en sus manos para después arrebatárselas, no

Un abucheo se escuchó por parte de los chicos mie

quila en mi garganta —dij

icos celebran vitoreando y chocando sus puños. Después de ese trago noté como Valet sonrió, dejó el vaso boca abajo sobre la mesa y entonces le arrebató la pelotita a Lucas. Se

ste lo mismo. Casi río, por aquello sobre todo cuando vi la reacción de los

e suerte —dijo uno de l

u lado el resto del juego —le dije

ando el último tiro cayo directo en

el primer tiro Valet hizo una gran jugada hasta dejarlos sin un vaso. No era algo que me sorprendiera, desde

par de la mesa mirando todo el juego hasta

rebatarme el vaso que me había d

rbos al vaso rojo en su mano—. Ya se te está subiendo un poco, eh —la miré co

o tú conmigo —me ful

para ganar —me incli

ero antes de que pudiese darse la vuel

te puede hacer mal —le dije acomodando

ugó la nariz y sonre

pudiese decir algo más me

donde un bartender que se encontraba cerca de la entrada trasera de la casa, al igual que

ida energética y los tragos que había tenido que tomar en el juego, los cuales sabía que estaban bastante cargados. Dejé un corto beso en su cabeza aún con mi mano entre

? —dijo m

sonr

aré —le robé un beso después ac

ro sorbo a la bebida despu

pulgar. Se veía tan preciosa. Estuve a punto d

nda —dij

ser una jo

endo aquella voz. Yo lo hice igual, girando mi rostro en la misma di

ijo Valet cas

écil no

ercándose a nosotros mientras sonreí

orrespondido por ella. Las ganas de tomarla y apar

starías aquí —dijo Valet r

brió la boca con sorpresa como s

n la misma universidad que Nate —dijo Val tocándole e

cil ex vecino de mi chica me miró, sonrió y me dio

iendo con la boca apretada—. ¿Desde hace mucho están aquí? —preguntó

rtida de beerpong —respondió Valet y después apunt

n mirando a mi chica con a

o Valet riendo hacié

uedo dar

e los tacones y ponerte los otros zapatos? —lo

ras en su cabeza. Bajó la mirada a sus pies

aliviado de que no se diera cuenta de mi intento p

es a cabeza y si no fuese porque ella se había ade

l dedicándola una sonrisa mientra

brado de él su voz volvió a detenernos

Necesitaba asegurar primero el que pudiese conseguirla pero ya que estás aquí, te doy un breve adelanto —dijo al principio

a de qué? ¿De qué caraj

Valet abriendo los ojo

s información —se encogió de hombros metiendo u

bía visto con Bastian

—le dijo Valet encogiéndose de homb

en algún lugar para que te lleve a la entrevista —le

rda estaban

ijo mi chica y no dudé en comenzar a caminar aún toma

ncipal que nos llevó a el frente de la casa, personas tomando y fumando se encontraban ahí, conversando o riendo. Algunas personas besánd

mos unos cuantos pasos más lejos donde había dejado el auto, giré a mir

nté mirándola a los ojos—. ¿A qué

s segundos casi

Me ha ofrecido una oportunidad de trabajo, me dijo que su tío t

es? ¿Su tío t

ntiéndome algo mal de que en ningún momen

a esperar a que la entrevista se conf

vis

untó confundida después de

exvecino —dije y en auto

así. Él no ha hec

lo t

has personas, Nate.

s para no hac

cruzó de brazos mirándom

Literalmente te comió con la mirada, Valet, ¿acaso no lo

conversamos, Nathaniel —di

por tus cosas al edificio —espeté de inm

ue tenía algo conmigo, ¿cómo se suponía que me iba a agradar después de eso? Cualquier

a preguntarle mir

ostuvo la

o desvió la mirada de mis ojos—. Me ayudó con unas cajas

tro lado. Apreté los labios y negué

a quiera conseguirte una entrevista para trabajo? —la miré con

o y mirándome casi ofendida—. ¿Qué

anta relación como para que de la nada quiera ofrecerte un trabajo, ¿no crees? —pregunté mirándola mientras ladeaba mi cabeza, di un paso hac

os dio un paso hacia atrás, dio un sorbo a la bebida y después la tiró al suelo co

és dándose la vuelta volvien

er

zancadas hasta alcanzar

a que la soltara—. Eres un egoísta, ¿qué acaso no puedo

e lo hubiese dicho no soy quien para decirte si puedes o no, es tu vida —dije volviendo a tomarla del brazo haciendo que me mirara—. Pero no confío en él, ap

ndos, noté como apretaba los labio

a mirarme y zafándose de mi agarre—. Y no trates de disfrazar tus palabras, Nathani

rgida en el espíritu de la fiesta. Quería largarme de ahí, quería tomar a Valet y largar

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