img Rebecca  /  Capítulo 4 Dejando las máscaras (1era. Parte) | 100.00%
Instalar App
Historia

Capítulo 4 Dejando las máscaras (1era. Parte)

Palabras:1867    |    Actualizado en: 05/08/2022

ma mad

s, Fr

e

ida desbordando extravagancia, más bien parecía disfrutar de ser una persona sencilla, claro que los anteojos ridículos con la forma de ojos de gato no ayudaban mucho, igual todo lo que se ponga le luciría bien puesto que es bellísima, dejándome más expuesto a caer en sus redes, ya que existe una gran verdad en las palabras que repetí, me interesa

ocida como la medusa del papel en el periodismo, pero no es un halago, es una realidad, pues sus ojos azules intimidantes te fulminan al punto de sentirte paralizado como convertido en una estatua de piedra, además que su belleza se ve empañada por el carácter endemoniado que posee, es una mujer con el cabello rubio, piel blanca,

en unas horas, así recorro la distancia del pasillo para abrir la puerta, más apenas ingres

sobre todo deje hace mucho tiempo de importarte, no te debo explicaciones de lo que haga con mi vida– e

a de celos, ni de reclamos como intentas sugerir. Ahora dime lo que quiero saber, ¿Conseguiste hablar con Rebecca Cal

as todas las señales, estás acostada en mi cama con un vestido rojo bastante provocador a una hora inapr

s llegado a esta hora de la madrugada sino conseguiste nada, ¿Qué

al adivino, pues existen tres cafeterías en la misma cuadra, fue una proeza haber atinado para contemplar a Rebecca Cal

bre que ha enfrentado miles de situaciones peligrosas y no tiene lógica que seas incapaz de hablarle a una mujer. Voy a tener que ch

cama, como tal no lograrás conseguir lo que quieres. Dame más días para acercarme a Rebecca Calvin por favor, además no p

trabajo es de Dick. Otra cosa más, ten cuidado de enamorarte de ella, de lo contrario no me sirves. Ahora intenta descansar,

be

n su aprobación sintiendo que vivo en una jaula de oro, que no tengo libertad de tomar mis propias decisiones, además no todo debe girar alrededor de mi trabajo, más bien es un complemento en la vida de las personas, por ende no tengo intenciones de s

nsatez, de tener el control de mi vida por primera vez, pues tú no puedes seguir actuando como si fueras mi dueño.

de los inescrupulosos de los representantes, mucho menos has estado mendigando una maldita audición, ni has sido una extra en una película. ¡No! Rebecca Calvin entro por

cambiar entre nosotros, tienes que dejar de controlarme en cada paso, es todo lo que necesito, aunque sino puedes hac

e todo no quiero que el trabajo que he hecho en estos años lo tires por la borda por alguna estupidez. Voy a confiar en ti, igual

lo que haces, y espero no solo seguir contando con mi manager, sino también con mi am

tegido es porque me importas muchísimo, más que todo no quiero qu

la

ras, sin reglas, sin tiempos, ni acentos, seré Avalon Jones, como tal me bajé del taxi unas cuadras antes para llegar caminando a la cafetería, pero para mí asombro contemplo a

unque es bueno haberme equivocado. ¿Qué te parece si vamos

es lo que tienes en mente– reacc

opones, porque quiero descubrir que es tener una cita c

os a una puerta antigua de madera, como si fuera la entrada de un castillo, donde apenas se abre sonrió admirando las guirnaldas de flores, las luces que iluminan el sitio de una f

e probarás un poco de mi comida al estilo francés, y si de

ue confesarte que no soy buena en la c

ra más

elajante ser tratada como una simple chica, más ahora quisiera conocer al hombre que tengo delante de mí, tal vez lo ideal sería alejarme de él, porque en unos días debo marcharme y no lo

mujer, más bien la última vez que lo hice no terminaron bien las cosas, tal vez po

ersona de lo que su rostro muestra, por ejemplo, tú, eres un enigma, un la

Anterior
Siguiente
Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY