Sentada junto a Marlene, Scarlet se dio cuenta de que el tazón de medicina se había enfriado. Al parecer, la anciana aún no la había bebido.
"¿Por qué no tomas tu medicina, abuela?".
"Es demasiado amarga. Yo ya estoy vieja, así que no hará ninguna diferencia si la tomo".
"Pero la necesitas. Déjame conseguirte otro tazón".
Scarlet estaba muy familiarizada con esa mansión, ya que solía visitarla cuando no tenía nada que hacer.
Sirvió otro tazón de medicina para Marlene y le pidió que se lo tomara.