chez, mis

l año sin parar, pero es imposible cambiar la fecha de la reunión, el hom

rdo con fuerza el interior de mi

tarde, solo debes cambiar los tiquetes y te daré un día

tro cliente, de lo contrario perderíamos una producción demasiado

í e

interponiendo en mis planes una y otra vez, estaba a d

o tengo la certeza de que es el hombre adecuado, ha sido paciente y ha s

ta. Y con sexo normal, como ese que tienen las personas normales. Aun

endo poco a poco de mi sistema. Aunque en algunos momentos se presenta ante mí y lo extraño, quisiera ver sus ojos, esos que son iguales a los de Tamy

—Eric está besando con delicadeza mi cu

apaz de hacerle es

ía adoptarte oficialmente —lo esc

estoy segura de que

omo a su hija y a Ta

iene nada

poco de celos, que tu y Tamy pas

tonta, te la pasas bastante tiempo en casa y cada dí

a esa pequeña co

o

con devoción y me encanta verlo. Sube mi falda y arrastra mi trasero hacía afuera, nota que tengo una prenda que es transparente y deja poco a la imaginación, está de rodillas y entierra

rro porque aunque es la hora del almuerzo en

íos y se pone de pie, veo su erección y quiero acariciarlo, pero me

cuello, acaricio su mejilla y dejó un beso suave sobre sus carnosos y tentadores lab

uiero

uiero

ligación debo liberarlo, él debe i

iere hablar contigo antes

altan d

iñera de Tamy viene en

qué no me in

nto, me dijo que la niña

vios del señor Sánchez serán calma

hasta su

ien, eres la mejo

creer tanto

que lo creas

do estoy por llegar a la oficina del señor Sánch

é suc

g… L

s para la reunión, ¿Qué cre

te afectado por la repentina llegada de los

z no se ve de muy buen semblante y d

ar con ella y yo me encargare de ate

ro

mejores clientes, no tienen derecho a jugar con nuestro tiempo. Yo me haré

go dando órdene

tos de trabajo y que la delegación deberá esperar en la sala de juntas hasta que

uestras adicionales, los conozco mejor que a la palma d

es Julián, así que la personas que está esperando por nosotros debe ser igual que él. Revisó nuevamente

probable que la persona que venga sea un viejo compañero de trabajo, pero al mismo tiempo puede ser simplemente nad

mi asistente, abro la puerta y una carpeta cae de mis manos. Me inclino al piso para re

aci

elevan buscando el dueño de esa voz. Quiero creer que es una pesadilla, quiero creer que estoy alucinand

n las personas en la sala de juntas, intento escucharlas pero me

on fuerza el sonido me saca del lugar en el que no se que esto

, quiero irme, quiero morir, siento como

mis brazos. Y de repente me doy cuenta que estoy perdida, que lo que creía

encendidos en ira y odio, ese mismo que me mostraba cada vez que estaba desnu

RDAS SIGN