ra el pavor que le recorría todo el cuerpo, sobre todo porque la voz de aquel chico había provocado un extraño éxtasis en su sistema nervioso y en todo lo q

mon

muy raro, no era normal y menos, que su león interno ronroneara de esa forma, co

enos con su cerebro y mente, ese chico no salia de ellos y su corazón cada ve

l destino habían creado una alianza para confabular en su contra y eso le ponía aun mas los nervios de punta, cuando menos lo pensó,

ro q

tía, no era para nada normal en estos días en los que los alfas son rudo

cosas que estaban atacándole los nervios, mientras paraba de caminar en un lugar en el q

a algo en lo qu

ado, unos minutos después sintió una gran mano posarse en su hombro del lado derecho que le hizo voltearse de una forma mu

desde la punta de los dedos de sus pies, erizando cada vello en

e temor mezclados en su voz al tener el fuerte olor

no por eso salgo huyendo como O

en

alfa interior gruñía exigiéndole que se defendiera de aquellas palabras que profanaban en lo más hondo d

fue un accidente torpe de parte de ambas partes. Además, tenía una historia que no le dejaba reaccionar como deberí

espondía a la de un depredador acechando a su débil presa, y claro que estaba al tanto de quien era la presa en esta situación, así que

vo con unos pocos de sus compañeros, no podía darse el derecho de faltar a sus primeras clases y verse ante los pr

ulto de esa índole? En pocas palabras,

ara mala suerte de ese que quería hacerlo enojar, Jasper Bennett tenía una paciencia que incluso un monje de cualquier santuario envidiaría. Así que

bola de nervios y timidez andante, sintiendo el calor qu

a super

eza de lado a lado de acuerdo a lo antes dicho —. H

uper… ext

ando en su contra, era más que obvio que comenzaron a gr

fiquen a

que sí, él era el único

las santas deidades comenzaban a repartir las de

cosa en esos minutos que tenía de esta

alditamen

ia de la misma forma en la que fue en su antigua universidad y anteriormente,

n la universidad? Bueno, eso lo de