* * Merlí * *

tiendo. Después de la boda, solo se realizó un muy breve brindis (según él); sin embargo, para mí, fue una eternidad. L

a del lobo, para caer en la

a y regresa su atención a su celular—. ¿A dónde vamos? —exijo; y aquello provoca que él guarde su celular, c

has preguntas —prec

sma. ¿A dó

por qué re

s hac

en la que te diri

ufa con molestia, para después desviar su mirada—. Yo segu

luna de miel —señala relajado; y aqu

terrogo sorprendida, al tiempo en que s

es s

xijo de pronto, al comenzar a tratar de abrir la puerta de la limusina; sin embargo, me es imposible—. ¡Que se

—expresa con absoluta honestidad—. No me pareces bonita, no eres para nada atractiva, no eres mi tipo de mujer. Jamás me

u información

, AHORA, CÁLLATE Y DEJA

no me das

de su lugar y venir hacia mí para tomar mis muñ

emerosa, al intentar soltarme

mo esposa. TÚ no me gustas. Eres muy poco atractiva, molesta, exasperante y con una voz que saca de quicio a cualquiera. ASÍ QUE DEJA DE

s un

dices, niña, no te

que forcejeo para alejarlo de mí—. ¡Eres un hombre p

resar con él, entonces por mí no hay ningún problema —responde relaj

l o peor que

ta autosuficiente, al a

bido a que, para ser honesta, el otr

de victorioso; y me suelta p

a.

r otro insulto —advierte serio y, luego de ello, solo toma un d

ltarlo en silencio, para después pensar

lanes y, cuando menos lo imaginé... estábamos en la entrada de

encio, al observar los alrededores de la propiedad (l

a de repente; y yo l

pudiste haber dich

icaciones —me recuerda cuando la limusin

con dificultad, debido a que el velo s

ás fuerza, pero sin éxito alguno, logrando así que él se burlara de mí (pude notar que había esbozado una sonrisa s

mi velo y tirármelo—. Ya, sígueme. No me hagas perder mi ti

pués, llegamos al pasillo de las habitaciones. AL

demandante voz;

o q

que veng

o estar a so

solicitud,

o pie

gunta y, ante ello, solo em queda

siénta

estoy

illa del pequeño salón (el cual, en un inici

é qu

estos p

on esos

exo

rmaré

r el tiempo y fírm

antes

a de u

! —me mantengo firme;

que eres e

otra! —le alzo la voz; y aquello provoca que él venga a mí y vuel

ces? Sué

que me levantas la vo

éltame, Me es

ma, no pienso to

e, me la

uelta—. Llévate los papeles, léelos, n

o lo

y yo me quedo gélida—. Ahora, ve a tu habitación, llévate los papeles y alístate

s estar

Cuando regrese a la casa, quiero verte con eso puesto —

cerciorarme de que lo que había dicho era una broma; sin embargo, no

prende, pero de una manera extraña, ay que... no me imaginé que lo

rañamente decepcionada—. Idiota. Sé que no soy una top model, pero me gusta mi cuerpo; es lindo —s

ido que había en el enorme clóset para salir de mi habitación e ir en busca de mi abuela. Iba a aprovechar

lego hasta la sala y dos h

orit

rijo; y aquellos

entamos

firmeza, pero ellos no lo hac

e—. El señor no nos ha dicho

iosismo en mi interior—. Más vale que se aparten de mí, si no quieren que le diga a mi marido

intentó escapa

do entrar y salir cuando quiera. No necesito de la autorización de

precisa uno; y yo celebro en mi

eñalo

, se

es co

, s

serás mi c

señ

riodista

o, se

e una vez —señalo y, sin

* * * * * * *

* * Bayá * * *

uno de mis bares. Ahí, puedo ver a mi amigo en

ste un

idiado, al tomar mi copa de whiske

calm

e lo exasperante

paloma. Además, hasta ahora no entiendo por qué

asunto tuyo

no entiendo el motivo de aquella decisión, aunque, para ser honesto

. No tolero

ue el matrimonio no t

sés... —advierto—. Mejor

mación impor

ué se

e nombre, solo provoca que mi cuerpo hierv

o trago y beberlo igual que e

e reacciones de esa

iento es rabia... —aclaro

pronto; y aquello ha

lo que

ca

nde sac

mi g

é me lo

anillas —suelta sin tino; y aquello provoca que

uitarme la copa de msi manos—. Parecie

uro de lo q

de mi

do al mirarlo—.

gente infiltrada

quiero saber el motivo p

der

plí

ensa conseguirlo de Cabanillas, por eso

nuestra boda —completo; y m

onde del

lo s

lo de C

mujeres son así. Es lo único que les i

, la mujer con la que

sperante —preciso; y mi amigo ríe—. ¿De qué te ríes?

que d

que digo? ¿ué t

juicios apresurad

apres

í la información de la m

fica que no s

u padre, un alcohólico y adicto a los

ual a

en algún momento,

no su

stás tan

ME G

apa; he vi

o me lo

ella? Si llegas a... amar a

no existe

qué di

y, en caso existier

ínate la s

xasperante, poco atractiva, habla mucho y... me sa

por qué te cas

ondición que me puso mi padre para hacerme cargo de la mafia por completo. Si no acataba sus órdenes, estas iban a pasar a Abel. Y puede estar en mano

que la ele

iba a aceptar sin h

ho drama alguno? —cuestio

ría debido a los beneficios que le daría, PERO NO. JUSTO ME TOCÓ UNA LOCA QUE PARECE NO TEMER A NINGUNA DE MIS AMENAZAS —prec

siento que esto se va a

qué lo

ado sonriente, para después c