ue la aparentemente respetable señora Prince fuera la misma RedWitch que había conocido en línea la

amente el mismo tatuaje: una Luna Creciente con flores, y por lo que estaba viendo de la forma de sus

la sala de estar. Debía de empezar a preparar el almuerzo para todos, y cerciorarse de que la cena esté lista antes de irse al tr

ows privados y tenía una gran cantidad de seguidores en sus redes sociales. La mayoría de la información que encontró coincidía con la apariencia física de la señor

ino llevara una doble vida como modelo de cámara web? ¿Qué secreto ocultaba bajo su apariencia de am

ban a su cuenta de venta de contenido. Las fotos que había en ella eran de lo más sugerentes, pero en todas aparecía luciendo la másc

d de seguidores y fanáticos. Algunos de ellos pagaban generosas sumas de dinero por sus shows privados. La doble vida de la seño

po, aunque todos tenían algo en común: todos eran muy subidos de todo, y

enes un rostro angelical

o. Te pagaré cien dólares má

e esa máscara. Vamos, no seas

en los que, por lo general, RedWitch estaba en línea: De Lunes a Sábados, desde las nueve de la mañana hasta el mediodía y desde las dos hasta las cinco de l

punto de dar el show? Se fijó en el perfil de RedWitch y se percató que la misma ya estaba en línea. Ingresó a su sala de chat y allí estaba la en

parte de la casa lo estaba haciendo. Seguramente tenía que ser una donde, en caso de que su marido llegase de improvisto, pudiese ver todo lo que pasara en la calle. Tenía a su alrededor una d

soplando y algo molesto, creo el perfil. El sobrenombre que se eligió salió si

edWitch lo saludó

endo—. Creo que es la primer

Luke tecleó u

ra vez aquí. Gra

a Prince

efieres? —RedWitch tomó de la mesita que tenía a su lado

ores podía indicarle nada de buenas a prime

ijo el sob

mostró lo que decía la

podía ver absolutamente nada, dejando todo a la imaginación. Lubricó su dedo con su propia saliva, y lo metió debajo de la fina tela de la tanga. Era evidente q

icó en el chat. La señora P

toy disponible para

era muy sutil. Mientras pensaba qué iba a hacer con esa invitación, la pantalla se congeló, avisando que la modelo

ado loco, totalmente loco, al ver lo que había visto anoche, más lo que había visto hace unos momentos; pero era muy consciente de que pagar cinco dólares el minuto era un

show privado. A pesar de que tenía una sonrisa e

los botones

volv

ce leyó el men

nsaste mi oferta en un show e

, pero ando co

uedas. Te aseguro de que no

irarte puedo adivinar que serían

h empez

es, Hunter. Me

estaba corto de tokens y no podía permitirse un show privado en ese momento, la modelo seguía coqueteand

ión. Su prioridad era su familia y su situación financiera, por lo que gastar dinero en shows privados no era una o

delo?», le preguntó. La

unos años —resp

rutas?», q

entir deseados a los hombres, y que el

necesidad. No vivían en la mejor zona, y en teoría el trabajo de su esposo como trabajador de uno de los casinos de Salem tendría qu

oco.» confesó Luke, observando y perdiéndose en el sugerente escot

e se sentía cada vez más atraído por la enigmática mujer detrás de la máscara. La señora Prince, o

uesta de la modelo no hizo más que aumentar la tensión en la conversación. Su sugerente vestimenta

sonrisa coqueta—. Me encanta saber que despierto pa

rse gastar dinero en ese momento. Además, su curiosidad sobre la doble vi

escote le deja a la imaginación», escribió Luke en el chat, mi

u habitación. Más rápido que un bólido, Luke ap

eguntó rojo d

ara tapar lo que era ev

aciendo? —qui

das. Nada importante —le dijo su

emos hambre —le dijo Tas

rmana pequeña con

hago un sándwich luego no van a come

. Quiero un sándwich…

onó el puente

ich a cada uno, pero no más de e

a la sala de estar, donde sus hermanos lo es

reta como RedWitch. La tensión sexual y el misterio que rodeaban a la enigmática modelo de cámara web lo habían atrapado por completo, y sabía qu