ué de

en el momento en que se sentó, cuando miró a los alrededores pudo percatarse de que no estaba en su casa,

os dos se lanzaban miradas de perros rabiosos luego de que osadamente ella alzara su mano y la estampara contra la mejilla de él quien ni se

ramática escena será mejor contar

o, revisando la agenda y cuidándose de no convertirse en el nuevo centro d

un martes p

es de que ella falleciera. Anastasia era su hija única, y aunque no le gustara vivir bajo el techo de una familia adoptiva completament

ugar de enviarla a su tienda por el café encomendaba la labor a otra persona, siempre la mantenía cerca, como si temiera que escapara en algún momento, sin deja

incómoda banca en el rincón pudo escuchar parte de la conversación entr

jefe, donde recibía absolutamente todos los derechos de la empresa se formalizó luego de una gran disputa con el anterior dueño, quien quería tener un ojo sobre su compañía de

ante obvia. Incluso Anastasia estaba entre la multitud, a primera fila par

mío indiscutiblemente, odio perder tiempo así que no esperen jun

en él daba una intimidante aura de superioridad. La manera elocuente

fondos monetarios de manera ilegal a cuentas bancarias personales y esa altísima cantidad de equipos robados solo eran una excusa para distribuirlos hacia donde se les daba la gana, vendiéndoles prototipos a la competencia como unas malditas rat

de aquella estafa. Cualquier rastro de amabilidad que había mostrado hacia ella se destruyó en un

gusta más que

rujas en una hoguera?» Pen

e son ladrones, traidores, inútiles, vagabundos, ofrecidos, lame botas y se regresarán a sus casas con un historial marcado de manera permanente y nunca po

útil'' –Algo que era tan absurdo como probable- Se mordía las uñas mientras veía a muchos de sus compañeros s

vería obligada a vivir para siempre junto a su familia adoptiva, eso no podía pasar, aún si tenía que arrodillarse y suplicar pieda

dos. — Anunció Erick. —

piros aliviados por parte de las

a rápido, las largas horas estando de pie en un ambie

el dinero que ganaba seguramente podría comprarse empleados nuevos que sí lo quisieran. Luego de la masiva despedida de personal

e horas, tanto tiempo que cuando sal

Escuchó que alguien le di

nterno hacia la sociedad. — Anastasia se detuvo en

ante auto, p

creí que sería conveniente llevarte de regreso, ya sabes, esta hora puede ser pel

vía a portars

nrió con timidez, no quería mostrar las pocas ganas que tenía de subirse a su auto. Pron

sporte para que el bus que recorre esta ruta la

ntó una ceja, retándola. — Bien,

rquedad, Erick simplemente le abrió la puerta del copiloto. — Que bueno que hayas ac

Preguntó luego de darle la direcci

me gusta juntar el trabajo y

ía, tampoco quería averiguarlo y sacar nu

ompiendo cosas. Pero trataba de ser amable con él durante el tortuoso camino de regreso, vio la luz al final d

traído, espero no ha

raba que no

o de que la puerta estaba bloqueada. — Oh, un momento. — Desbloqueó la pu

derecho a

a. Si no vas v

no me que

suspiró

erés hacia ella, trató de p

la sala, tomó una ducha para aclarar sus ideas y luego de ponerse pijama quedó tan profundamente dormida que incluso s

o semejantes a máquinas, la única chispa de emoción que vio fue al presentarse a la oficina de su jefe y verlo enojado, con un cigarro en la mano mientras hablaba por teléfono. Estaba grit

n de cólera, mucho más terrible

ejo, ella también discutía bastante con Félix por llamada, probablemente porque ninguno tenía el valor de decir lo que pensaba en las narice

elegante como las que s

nastasia volvió a entrar a la oficina al escuch

rde de un colapso, pero él la miró mal y decidió centrarse en el trabajo para no

brir y cerrar de ojos no quería imaginar la rapidez con la que

hubo trabajo y más

resultara un poco difícil, al menos sirvió para que dejara de tener la mente en dónde no debía. Pasaría comprando las cosas con las que prepararía la cena, sin embargo, una bot

trataba se disculpó, no quería cederl

unciar su nombre le produ

rado novio sonrió, nerviosa, no tenía cara para

haces aquí a

e incómodo por alguna razón gracias a la expresión que

sale de la oscuridad y te ataca? — Anastasia rió por compromiso, pretendiendo admirar la bonita etiqueta de

desvió l

ajo me ha con

ias de Erick la tenían al bord

aún más si te enfermas, y por favor no pierdas el co

nrisa de Félix era una

dirigían a pagar él no tuviera nada en las manos, Anastasia e

a busca

én es

o, terminó su turno hace poco y he venido a recoger

e que regresarse completamente sola? — Su cuerpo tembló. — ¿Lo

ndo su ceño frunc

de la cabeza con tus celos enfermizo

de baja estatura y con un lindo cabello rizado, además ella no parecía muerto viviente con un trabajo que consumía

tés en tus cabales. — La p

a irte, Félix!

e la tienda fue el sonido de su prop