dar de Alejandro, siendo la arquitecta de su impe
use entre él y una navaja, ganándome una cicatriz que é
ados cuando finalmente me propuso matrimonio, justo
a siempre", se convirtió en mi infierno personal al encontrarlo en
n Sofía como tapadera, por fin puedo amarte sin que nadie nos
farsa: una elaborada mentira para encubrir una r
sató la furia de Alejandro, quien me culpó de todo, golpeá
r sobre Camila y desmayarse por su sobredosis, el dolor f
arme a un hombre que me veía como un mero o
curidad me envolvía. "Si hay otra v
iesta de compromiso, con Alejandro alzand
oportunidad. No para arreglar cosas c
qué el número de
guntaste la última vez que nos vimos en la co