a solas, pero no en cualquier lugar. Le pedí que tuviéramos

lugar hermoso que siempre pensé en llevarla y nunca lo

en que Aura comiera o que Sami tomara los cubiertos bien, que no mancharan su ropa, no tiraran la comida o no hablaran

jos, en nuestro hogar. Por e

era le pagu

ella la que siempre se sacrificó, tan dedicada, tan entregada. Siempre me recibía con una sonrisa y yo a ella con mi frío beso, llegan

tenía yo a qu

tético intento de querer recuperar a mi esposa con una última ci

a vez el divorcio

ían hace poco. Tenía dos ha

evármelos los fines de semana a casa. Entré a saludarlos y

si vas a dormir a

s. Pero seguiré visitándolos con mucha frecuencia. Y tambié

nas veces llora en las noches y me despierta. Ella está muy triste. Seguro es po

migo, sabía que todo este proceso

gué las luces, ya Aura dormía

a la niñera, su nombre era Letty

visto con un maquillaje tan hermoso, tenía unos tacone

e bastó pedirme el divorcio para bajar de peso

ya duermen

ba sobre el sofá y le dio v

de agua a Sami si se despierta, no mas o se orinará en la cama. Aura que no pida encender

ocupes, qu

del coche y ella e

de que aceptara tene

s her

. ¿A dónde iremos? No quiero lle

mos una cita, me sentía como la pareja joven de padres que al fin dejan a sus hijos con alguien y se lanzan a la noche para tener una cita

osa y he solicitado en algunos lugar

e esperar. No se co

te de inmedia

as. ¿No recuerdas lo difícil que fue conseguir mi

para cuando tuvieras tu primer sueldo? Pa

os cuentas y no e

Se retorcía mientras recordaba aquella época que empez

ueroso, Meg. Aún así te la comis

r sueldo, era algo para disfrutar as

No tardó en llegar la abundancia, nuestro Sami, una casa mas grande, escala

rde, de madrugada, por primera vez, borracho, ni podías caminar, no recordabas

espués. En la mañana te encontré en la entrada de la casa, sentada con tu cabeza entre tus rodi

primera y la última. Nunca vo

todo fue desagradable y en nuestra inexperiencia no creo que lo hayamos hecho

moción.—Incluso personas importantes vienen

i le supliqué para que pidiera el

ba realmente

a la barra antes de ir a la mesa. Me

e g

ome ver a la derecha. —Es Hugo.—dijo en un susurro mientras veíamos a un hombre entrar al restaurante s

Viene a la barra,

ca y tomó una postura normal, a mi lado se

ervé d

ras su trabajo o algo así. Empieza una con

dentemente fue él quien inició la conversación co

o me era familiar, no sabía ni porqué, como si nos hubié

me suena

la televisión

da, soy

arecía estar intentando recordar

reunión. Pero creo que nos hemos visto

conocer al entrar. Mi nombre es

Martínez.—le extendió

conoce, estudió periodismo.

a escuchar eso. ¿Eje

dos hijos. Lamentablemente no tengo ninguna experiencia, pero estoy b

permite dejarle mi tarjeta y veo qu

io?—dijo si

bes quién será la nueva estrella y si la llevas tú, puede

ro se ace

z, su mesa

pero es demasiado familiar su rostro. Recomiende a su esposa que me llame, puede que

y luego la levantó para ver la tarje