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Historia

Capítulo 4 ¿Donde esta ella ahora

Palabras:1843    |    Actualizado en: 02/12/2022

vista d

en algunos archivos aburridos esperando mi revisión o señales. El trab

os a almorzar juntos hoy —le

nta. Tengo un trabajo que

como un niño. Voy

puedes recogerme si me prom

na habitación privada en uno de mis ho

a vida? —pr

ue te llamé para almorzar co

n tu vida? Lo tienes todo — preguntó Jimmy mientras comía como

er —respondí mientr

algo nuevo? ¿No puedes encontrar interés

no son para mi —resp

cerse —e

ños. Felizmente casado y orgulloso padre de dos hermos

asarme con alguien solo para divorciarme de e

sa del mundo. No puedo imaginar mi vida sin

to? —pregunté ya aburrié

as tus formas arrogantes y malos modales. E ignorar ese comportamiento requiere una mujer de fuerte voluntad. Porque nadie puede cambiarte. De hecho

cuentran las mujeres. Y ella no solo me acepta a mí, sino también a mi

más. Te conozco, Alex

e las muchas razones por las que no lo veo a menudo. Pero, de nuevo,

i descanso casi ha terminado. Necesito regr

hacer tu propio negocio? —pregunté por. mil

abajo —fue tod

éfono empezó a so

r esto. Ve subete

o —respondió c

Ho

n sobre la señorita Monroe —el

por su comportamiento grosero en la mañana. Estoy en el punto en el que todo mi ser dolía por su entrega.

—pregunté con una s

Ella también tiene algunas citas con al

ora? —pregunté con u

n n. 1306

a Jimmy con el ceño fruncido. Sé que mi cara está revelando toda la ira y la frustración. De todos m

mientras te ves así. Mi hospital está a solo dos cuadras de dista

n el mald

a con incredulida

rabajo y me dir

del hotel cuando la

a seguí. Había mucha gente y era el últi

dentificación y era de Antoni

ré en contacto contigo —dije

n alguien. Era un ch

to hombr

ien _re

jadeos. Me di la vuelta para encontrar a ese tipo de rodillas

areja. No sé por qué, pero quería ver su rostr

momento. Pero luego la encontré abriéndose paso entre la multitud y dirigiéndose hacia l

o asi en tan poco tiempo? Puedo decir impresionante pero no quiero admitirlo. Entro a su habitación, elijo no encender las luces y de

ruido cuando ella comienza a desabrocharse el vestido. Y su olvido mientras se desnudaba me excitaba aún más. Aunque no pude ver su cuerpo, el solo hecho de saber que se estaba desvistiendo en mi presencia fue abrumador. Se mete en la cama y yo me acerco a ella de puntillas. Ella no est

cuando noto mi presencia y dejó caer la l

on dureza ambas manos con la mano izquierda y la sujeté a la cama con todo el peso de mi cuerpo. E

a primero. Entonces, tu tiempo se acabó —estaba tan enojado y sus labios estaban tan cerca de los m

idad. Cerré los ojos y gemí de placer. Fue suficiente para darle una pista de lo que estaba pasando y finalmente cedió. Pero luego comenzó a llorar y sollozar de nuevo. Mi pecho ya estaba en contacto con sus pe

lo diré a nadie —dijo entre sus pequeño

que te relajes y te rindas —me miró mientras yo hablaba con ella. Entonces, aproveché la oportunidad para t

n era tan desigual ahora. Era como si estuviera luchando por respira

. Y ella se queda completamente quieta. Miré hacia arriba para encontrar su cabeza inclinada hacia atrás. Sabía que se rendiría. Me reí. Liberé sus manos, levanté mi peso sobre ella, solo para sostener su cintura ligerament

ierna y estaba haciendo una mueca de dolor. Aprovech

. Antes de que pudiera salir

su cuello para sostener su cuerpo y deslicé mi otra mano entre sus piernas. Estaba empapada. Estaba más que frustrado. Sentía ira, dolor y frustració

ar —le dije en su oído mientras apretaba los dientes

ca aceptaré algo tan

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