/0/15089/coverbig.jpg?v=523a3e5d2ee2a8421eabe0ecc53067c9)
Quería poseerla, de hecho era lo que más deseaba en el mundo. Verónica sacaba los instintos animales de todo hombre que posara sus ojos en ella, en especial los de él. Esa hembra creía que había escapado de las garras del lobo, sin embargo, él podía encontrarla cuando quisiera porque podría rastrear su aroma en dónde estuviera, ella era suya y nunca la dejaría alejarse.
''Con el rostro cubierto de lágrimas te vi por primera vez, no me importó nadie a mí alrededor, ni siquiera el idiota que estaba a tu lado en ese preciso momento.
Desde ahí supe que serías mía.
El deseo nubló mi vista y tu olor quebró mi razón.
Desataste mi lado animal, Verónica.''
Y con esas cinco líneas impresas en un papel negro fue que mi tormento comenzó.
No entendía de qué se trataba todo eso, nunca nadie me había dado ni siquiera una carta, no me consideraba una chica linda para llamar la atención de nadie, no tenía grandes atributos y mi cara es bonita pero simple, sin embargo, recibía esa nota que lejos de gustarme me ponía los pelos de punta, sobre todo esa frase final contundente.
Ni siquiera salía de casa y cuando lo hacía era para ir a la universidad, de allí de vuelta a mi dulce hogar, no sabía ni cómo ni dónde había despertado el interés de un chico del cual estaba segura no conocía pero no le di mucha importancia, en ese momento no lo sabía ni estaba preparada para toda la avalancha de emociones que estaba a punto de experimentar, no obstante, guardé el papel que irradiaba un ligero aroma masculino entre mis libros quise desviar mi mente así que busqué mi teléfono para poder leer un poco. Aunque no conté con que mis pensamientos volverían una y otra vez a la nota mientras que la curiosidad me embargaba.
¿Quién es él?
Rodé en la cama con curiosidad y mis manos tantearon otra vez el papel, inhale su aroma, esta vez podía notar otro olor, más masculino y sobretodo más atrayente.
-Verónica ¿Estás lista? -Preguntó Ana Alice entrando a la habitación.
La rubia arqueó una ceja al verme tan ensimismada con la carta entre las manos.
Entró en la habitación sin dudarlo y se dejó caer a mi lado en la cama tratando de curiosear cosa que no logró pues yo no lo permití escondiendo la hoja entre mis manos con una sonrisa divertida al observar el ceño fruncido de mi amiga.
- ¿Qué escondes? -preguntó con sospecha haciendo que sonriera.
Ana nunca iba a cambiar.
-Nada que te incumba, chismosa.
- ¿En serio? Pues me lo tendrás que contar porque a mí no se me escapa nada.
Ambas nos levantamos de la cama sonriendo, entonces Ana Alice se arrojó hasta donde estaba yo tratando de quitarme el papel pero por más que me hizo cosquillas se rindió al darse cuenta que no iba a mostrárselo.
Por alguna razón sentía que no quería compartir esas palabras con nadie, era algo muy íntimo aunque no lo pareciera.
Además me moriría de vergüenza si ella se enterara sobre esta carta enigmática de un extraño pervertido.
-Venga ya, si no quieres contribuir con esta chismosa, entonces alístate, ¿Olvidaste que íbamos de compras?
-No, no lo he olvidado, me cambio y salimos.
Ella asintió mientras que yo fui a buscar mi ropa.
Cuando estuvimos fuera de la casa en el centro comercial opte por contarle a Ana sobre la nota evitando decir palabras textuales además de que la pequeña cartita la había ocultado bien entre mis cosas, ella chilló frenética pidiendo que le contara sobre qué era lo que decía exactamente.
-No te lo voy a decir -alegué sacándole la lengua causando que ella resoplara.
-Venga, ¿Te ha dicho guarradas? -preguntó entusiasmada.
Y enseguida me quedé estoica.
No podía creer que Ana me preguntara eso.
- ¡No! ¡Qué mente la tuya, amiga!
- ¡Qué aburrido! Será que es tímido o quiere tantear terreno, ¿Quién será? ¿Quién será? -murmuraba Ana probándose unos tacones negros preciosos.
Mientras que yo no dejaba de negar con la cabeza, probablemente si fuera a ella quien le llegaran esas cartas de guarradas estaría más que feliz, sin embargo, yo por el contrario echaría a correr, si las cosas se tornaban más incómodas, pero solo es una carta ¿No?
Pese a que ambas éramos mejores amigas no podíamos ser más distintas, yo soy reservada pero Ana Alice es todo lo contrario como si se esforzara por llevarme la contraria.
- ¿Y qué tanto miras? ¿Tú no vas a comprar?
-Ya tengo mi vestido, solo falta arreglarme.
Ana Alice sonrió satisfecha asintiendo antes de hacer una mueca.
-Espero que no se trate de uno de esos vestidos tuyos de monja.
Entorné los ojos con fastidio pero antes de que pudiera protestar Ana habló de nuevo.
-Vas a ver cómo vamos a quedar preciosísimas, Jazmín nos maquillará y nos veremos más guapas que la misma novia.
-No podemos quedar más guapas, eso es ser malas con Taylor -dije jocosamente siguiéndole el juego a Ana.
- ¡Con lo que a mí me gusta ser mala! -Soltó una risita insinuante-. Mira que si a mí me hubieran enviado esa cartita y estuviera tan sola como tú, hago hasta lo imposible por saber de quién se trata, después de todo no puede ser tan difícil, casi ni sales de casa por lo que tiene que tratarse de un chico de la facultad ¿Has pensado quien puede ser?
La miré confundida por el cambio de tema pero luego pensé que ella tenía razón.
-No he pensado quién, pero esto es muy extraño para mí.
Ana se encogió en hombros distraída con sus zapatos y para mi suerte se olvidó por completo de la carta que había recibido, por lo menos hasta que llegamos a casa dónde nos esperaba Jazmín para arreglarnos.
*
Después de la celebración de la boda de Taylor todas terminamos en mi pequeño apartamento con una resaca terrible, yo por mi parte al no haber bebido mucho solo tenía cansancio así que me despojé del vestido gris que había usado, con el cual Ana Alice había dicho que me venía muy inocente, y me introduje en el baño.
Con la toalla envuelta a mí alrededor salí a la cocina pues me moría de hambre, en el camino me encontré con Jazmín comiendo tostadas, como cosa rara, nótese el sarcasmo.
-Estás despierta, te ha llegado una carta, está sobre la mesa.
-Mesa sobre la cual tienes los pies así que bájalos o siente mi furia -bromeé sentándome a su lado antes de sacarme la toalla de la cabeza y secarme el cabello con esta.
-Es una carta sin remitente ¿Tienes un admirador? -Preguntó con picardía Jaz haciendo caso omiso a mi demanda.
-Probablemente -le guiñé el ojo, jocosa.
De inmediato Jazmín se enderezó en su silla mirándome curiosa.
-Venga, abre el sobre, me muero de ganas por saber qué dice.
Yo entorné los ojos divertida por su curiosidad innata.
-Mis amigas son metiches.
Dicho eso Ana Alice llegó sentándose frente a mí con recelo.
-No digas lo obvio y abre el puñetero sobre, siento que la cabeza me va a estallar.
- ¿Y acaso las palabras de este desconocido te aliviarán?
-Seguro que alivia mi curiosidad.
Me levanté para buscarle una aspirina pero cuando regresé encontré a Jazmín y Ana rasgando el papel.
Por alguna razón me molestó que lo hicieran sin mi consentimiento entonces dejé la aspirina sobre la mesa y tan rápido como pude le arrebaté la carta de la mano a Ana para después ingresar a mi habitación hecha una furia por la invasión a mi privacidad.
Solté un gruñido dejando la carta sobre la cama dedicándome a secarme para leerla luego.
La toalla cayó al suelo y una extraña sensación me golpeó al estar desnuda, probablemente había tenido una similar antes pero por alguna razón esta se sentía más intensa...
Sin darle importancia a mi paranoia fui en busca de mi ropa interior.
Desde niña Evangeline Rain ha soñado en casarse con el hombre perfecto y cuando conoce a Draco Breisacher parecía que su sueño estaba a punto de hacerse realidad, sin embargo, los secretos que abundan en torno a él encienden la duda en su interior y las irrefrenables ganas de saber qué es lo que oculta. Draco no es el hombre perfecto con quien ella planeó envejecer hasta el momento del último suspiro de vida, en especial porque él es... ¿inmortal?
Acostumbrada a los lujos y envuelta en un drama familiar Levina Zhang ni siquiera tiene tiempo para los misterios que rodean a Alekséi Ivanović, sin embargo, cuando él la rescata de una muerte segura la curiosidad en ella se activa adentrándola a un mundo que jamás pensó conocer, se acercará al misterioso chico en busca de respuestas las que solo él y la familia de Levina saben. Pero conocer a Alekséi es un secreto mayor, un secreto que ella quisiera descubrir aún más. Sin saberlo Liv está rodeada de mentiras y mentirosos.
La hermosa greco-francesa Callista Kafieri está realmente histérica cuando su hermana gemela le suplica que vaya a L'enfer la manada de cambiaformas más grande del mundo tomando su puesto para la boda de la hija del amigo de su padre y por favores que le debía ha tenido que acatar la petición de su hermana al pie de la letra, además de que de no ser de ese modo Valentina iría a la cárcel sin la ayuda monetaria de su padre. Pero de lo que no tenía la menor idea Callista es que quizás encontraría un hombre áspero que hiciera lo que ella jamás pensó que un hombre pudiera hacer, dominarla.
Todo lo que siempre había evitado de repente estaba allí, justo frente a mí. Los hombres lobo, existen. Y no solo eso, todo tipo de cambiaformas lo hace también, sin embargo su existencia no puede ser revelada. Cada manada está dividida por especie, todas las manadas son diferentes no obstante hay una en especial que superaba todas las expectativas y esa era L'enfer dónde además de tener al líder más fuerte de todos se trataba de la única manada mixta que existía sin contar que ellos son la más peligrosa del mundo. Los humanos no son aceptados y son tan crueles como pueden con los míos, ellos son animales sedientos de sangre, venganza y poder. Es por eso que debo huir y eso es lo que haré aunque me cueste la vida.
Ethan siempre consideró a Nyla una mentirosa, mientras que ella lo veía a él distante e insensible. Nyla había acariciado la idea de que Ethan la quería, pero se sintió fríamente rechazada cuando se dio cuenta de que su lugar en el corazón de él era insignificante. Como ya no podía soportar su frialdad, dio un paso atrás, solo para que él cambiara inesperadamente de actitud. Ella le desafió: "Si confías tan poco en mí, ¿por qué me tienes cerca?". Ethan, que antes se había comportado con orgullo, ahora estaba ante ella y le suplicó desesperado: "Nyla, he cometido errores. Por favor, no te alejes de mí".
La vida era un lecho de rosas para Debra, la hija del Alfa, hasta que tuvo una aventura de una noche con Caleb. Estaba segura de que él era su pareja designada por la Diosa de la Luna. Pero este hombre odioso se negó a aceptarla. Pasaron semanas antes de que Debra descubriera que estaba embarazada. Su embarazo fue una vergüenza para ella y para todos los que amaba. No sólo ella fue expulsada, sino que su padre también fue perseguido por los usurpadores. Afortunadamente, sobrevivió con la ayuda de la misteriosa Manada Espina. Pasaron cinco años y Debra no supo nada de Caleb. Un día sus caminos se volvieron a cruzar. Ambos estaban en la misma misión: llevar a cabo investigaciones secretas en el peligroso pueblo de Roz por la seguridad y la posteridad de sus respectivas manadas. Caleb todavía se mostraba frío con ella. Pero con el paso del tiempo, se enamoró perdidamente de ella. Intentó compensar el abandono de Debra, pero la chica ya no lo quería. Estaba empeñada en ocultarle que tenían una hija y también en hacer una ruptura limpia. ¿Qué les deparaba el futuro a los dos mientras viajaban por el pueblo de Roz? ¿Qué tipo de secretos encontrarían? ¿Caleb se ganaría el corazón de Debra y conocería a su adorable hija? ¡Descúbralo!
Lucia Meller es mi vida, me enseño amar, me enseñó a adorarla, me mostró el mundo de forma diferente, le di todo lo que la vida me ofrecía, y se ha ido; se llevó mi vida, mi amor, dejándome el corazón y el alma hecha pedazos. Ahora me duele respirar, me duele amar, me duele la vida. La quiero, jamás podré volver amar a alguien como la ame a ella; la quiero de vuelta, la quiero conmigo, a mi lado donde pertenece; pero por más que la busco no la encuentro, es como si la vida me la hubiera arrebatado y eso me duele, ella me enseñó que se puede matar a un hombre, aunque se conserve la vida, sin embargo, me canse, no puedo llorar por alguien que no me quiere amar y aunque duele, hoy después de casi dos años le digo adiós a mi sirena; después de todo soy Gabriel Ziegermman. Un año desde que me aparte de Gabriel y mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, amar a ese hombre es lo mejor que me ha pasado en la vida, a él le debo el hecho que hoy esté viva y tener a mi lado a mi mayor tesoro, él me enseñó que lo que se desea con el alma se obtiene, pero también me enseñó que amar duele, que su amor duele, a él le debo el dolor más grande, porque dejo de amarme, no fui suficiente para él, me enseñó que su madre, su exnovia y su destino no están conmigo, y aun así lo quiero de vuelta, sé que sus prioridades cambiaron; yo solo pedía una verdad sin embargo él prefirió engañarme y dejarme.Lo quiero olvidar y lo quiero conmigo, aunque no se lo merezca, pero como hago si amar ese hombre es mi arte. Ahora estoy de vuelta y lo único que quiero es tenerlo a kilómetros de distancia, porque me enseñó que yo también tengo derecho a cambiar mis prioridades. Novela registrada N ISBN 978-958-49-7259-0 Está prohibida su adaptación o distribución sin autorización de su autor. Todos los derechos reservados all rights reserved
Hace tres años, Avery quedó maltratada y sola por el hombre que más amaba, Dylan, pero ella completó valientemente la ceremonia de la boda mientras estaba embarazada. Tres años después, aunque estaban casados, con el tiempo se distanciaron. Avery se centró en su carrera y ya no creía tontamente en el amor. Pero su transformación instantáneamente hizo que Dylan entrara en pánico... ¿Y cuál es el secreto de hace 11 años que Avery siempre se ha mostrado reacia a revelar? *** "Fue a un bufete de abogados, se reunió con un abogado..." ¿Un abogado? ¿Avery está demandando a alguien? ¿OMS? ¿Existe algún litigio reciente contra la empresa? De repente, Dylan se rió entre dientes con frialdad: "¿A quién podría demandar? Soy el director ejecutivo de esta empresa. ¿Cómo es que ese asunto no me llega a mí primero?" La asistente tragó nerviosamente y habló en voz baja: "Señor, no hay ningún litigio contra la empresa. Se reunió con... un abogado de divorcios".
Brit Su, una chica con un gran objetivo en su vida: conocer a sus padres biológicos y la razón por la cual la abandonaron. Ella es trabajadora, soñadora y su pasión es ayudar a los demás, se embarca en un viaje a Shanghai su tierra natal para realizar unos proyectos En el transcurso de su viaje se encuentra con Daniel Ye, un joven CEO que ve la vida en blanco y negro, el cual no cree en el amor, pero en cuanto ve a Brit queda en un estado complicado que ni él sabe si es atraccion o amor. ella lo hará ver la vida de otra manera y colores. Lo de más lo tendréis que descubrir.....
Tras ser expulsada de su casa, Harlee se enteró de que no era hija biológica de su familia. Se rumoreaba que su empobrecida familia biológica favorecía a los hijos varones y planeaba sacar provecho de su regreso. Inesperadamente, su verdadero padre era multimillonario, lo que la catapultó a una inmensa riqueza y la convirtió en el miembro más apreciado de la familia. Mientras esperaban su desgracia, Harlee poseía en secreto patentes de diseño valoradas en miles de millones. Por su brillantez, fue invitada como mentora a un grupo nacional de aviación, atrajo el interés de varios pretendientes adinerados y llamó la atención de un misterioso personaje, ascendiendo a la cima del mundo.