img Princesa por Accidente  /  Capítulo 9 Conocer a una mujer | 20.45%
Instalar App
Historia

Capítulo 9 Conocer a una mujer

Palabras:1906    |    Actualizado en: 27/06/2023

n. –Viola dejó a la gata de Elisa sobre su cama y se sent

sde que llegó me

as de

duro. Pensé que ya había superado todo esto pero no puedo estar siempre con la tensión de que cuand

sus cenas y galas y con el apoyo de ella, Elisa pudo volver a la sociedad. Todos sabían su historia, al menos los de la familia, y V

me ama, jamás me tuvo siquiera en cons

mista, pero es posible que esta sea tu oportunidad de tener u

de la boda y eso lo sigo odiando con cada fibra de mi ser. Yo no puedo y menos quiero tener

sa. Sería un escándalo para l

rgüenza así será. Podré tener un hogar donde viva tranquila y la oportunidad de buscar un caballero rural que me respete y me qui

Jo

que estoy siendo egoísta... ustedes tienen el favor de los duques de Hastings, también de

erona de tu prima esta temporada y ce

ue confeccionaran algunos vestidos para su presentación e ir a los bailes. —Esperaré entonces para irme, solo por Felicity, pero durante ese tiempo puedo presionar para firmar la nulidad d

su amiga. Ella había sufrido, merecía que su cuñado pusiera empeño en tenerla, incluso a una e

mos sien

parte de la familia Hammond tengas nuestro apellido o

s emba

quiere hacer una cena para decirle a la familia. Le he dicho que por favor espere unos días

ción de John para ayudarlo con su herida. Lo que le sorprendió fue verlo dormido y no solo él, su gata estaba acurrucada al lado de su esposo en una bolita. —Trai

isa

nía porqué quedarse más de lo requerido en aquel cuarto. —Pediré que le suban algo para merendar, té también para que pase el mal sabor de los medicamentos. –Y no

nera los platos de la cena, Felicity y institutriz, venían a pasar

les gustó fue que los chismes formaran parte de

que el señor está herido

o público atendiendo tantos negocios, tratados y toda la casa c

o que deberíamos hablar sobre cóm

licity para su presentación. Se despidieron antes de las onc

do un la

No decía nada, pero el estar ahí le causaba vuelcos en el corazón. Él intentaba hablar pe

ue imposible. —No te he a

de ponerle la venda y acobijarle. —No agradezcas. No

as co

né con mi

familia, Elisa. Pud

Además debí

l se levantó y fue a la cocina para llenar una bandeja con algunos pedazos de pastel y unas galletas, y ta

lado y tomó a Meribast bajándola del co

o antes de servirse una taza y sentarse en una de

dio la idea de una mascota. Estaba muy pequeña cuando

mbos mientras tomaban té y comían algunas golosinas. John sabía que tenía que

la bandeja mientras se levantaba de la silla. —Es tarde, d

más cómoda. Quisiera saber como lo hiciste. -Ella no quería hab

idos y quise probar. Y ha resultado bastante bien. -Lo vio asentir y sin volver a tener nada más que decirse al verlo terminar de comer

stando solo John se puso a pensar en que podía hacer para que su vida con Pen fuera por lo

staba sufriendo. Elisa había sido su amiga y se divertía con sus ocurrencias y le encantaba su dulzura. Era bueno encontrarse con ella en los ba

distancia y se portaba con tant

culpa. Elisa estaba más hermosa, había crecido en medio de la adversidad. Tenía ve

quería siquiera conversar con él, y seguro la alejaría más si intentaba imponerse

a sin duda debía hacer algo. Tal vez podía acercarse a ella conociendo sus negocios, lo que hacía,

osible ya que ella iba en silencio a ayud

una burla. Acercó su mano para acariciar a la gatita y al hacerlo tras las orejitas la escuchó ronronear y cerrar los ojos, disfrutando de la atención que él le daba. —Es todo lo que querías ¿Cierto?

aba dormida. —Te dejaré hacer

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY