evolvió con una mezcla nauseabunda de ira y confusión. Brenda era diferente. Realmente se preocupaba por ella.
permitía pavonearse frente a mí y a Camila, una provocación constante y sutil. Cada noch
esperando, deseando el día en que se cansara de mí
nda llevaba a su hijo,
seguido con una determinación despiadada, destruyendo sistemáticamente las f
había amenazado a su familia. Damián se había quedado allí, con
s ardiendo con un fuego posesivo-. Cualqui
la locura. Si así era como amaba, p
ba de afecto, respeto y libertad, todo lo que
e mucho tiempo. Es

GOOGLE PLAY