iró desde el umbral al inconsciente rey. —Dele es

s, me gustaría

téticamente perfecta como ella en su taberna. Incluso le habían dado al pobre Luc

lo c

istiana. I

a sostuvo el poco de la puerta. El hombre la saludó con la cabeza y se retiró, pill

tás despierto

pertó cuando era transportado por el hombre, sin embargo, si indicaba que h

—Acaba de meter al diablo en su n

hayan dado una habitación. —Le quitó la t

saber quien cocinó y en qué

aciendo su cabello hacia atrás, se

blemente, para ti, y huele

imiento, es super

om

el tazón de sopa y lo puso en el piso, al instante las t

rutarán más qu

spiración, implorando

ver tus

os vamo

lía de su mano, rápidamente se apagaba por la humedad que

millas solo. —Emmeli

runció

podré armar el p

ro,

s rotas de su vestido al cual usaría como vendas hasta que pudiese tener algo má

me cu

te guiará en tu camino, Lucifer.”

. —Volvió hacia la mesa, dejan

enemigo frente a ti. —Levantó el

no es tu p

hora Beliar comp

ént

ó a limpiar las heridas de su espalda con las telas. No estaban ensangrentadas, p

r su desnudez y Lucifer no tenía problema en estar semi

mel

Mm

s mí

éndole que ella no era de nadie, no era un objeto.

lo

ah

soy tuya cuando en reali

pero no voy a ignorar lo que siento.

do y le arrancaron el cielo de sus manos. Cuando se recuperó e hizo lo suyo, volvió a

on una mente astuta, ella era la mujer que lo enamoró, y aunque olvidó sus recuerdos, seguía

der eso, por n

se querido ser suya,

dió la

—Se puso de pie. —Sanan muy ráp

n m

son bendecidas. —Tiró

rvó su reflejo en el espejo no pudo evitar chasquear la lengua y

cifer n

s bestias ladraron hacia ella y ella,

cama, estaba parad

eberías convertirte hasta que tus heridas ya

ve a su estado humano. Cuando vuelve a su forma física, sonríe

y luego, aspirando profundamente, comenzó a mover su

distintas velas esparcidas por la estructura. Por lo que Lu

a uno de m

bes

marlo Beliar lo detectaría. El problema es que no les permito hacer presencias con munda

uedo invoca

a Abaddon. —Rápi

Dant

las invocaciones, ni la

si yo lo ll

ando el techo, tras una prof

de? ¿Qué son? ¿Mejores amigos

arrugó

é pasa

ana dejando caer la salpicadura de lluvia dentro. Las cortinas volaron por el aire, con una ten

no ser perseguido, pero cuando le ab

él rechaza el ritual no apareciendo. —Res

o rec

en como tras unos segundos, la figura de Dantalian apareció delante de la ventana. Alzando las manos en el aire, la niebla volvió

marse. —¡Las veces que te he llamado y me has r

mmeline y la irritación fue disuelta totalmente para mirarla con

bía enterado que Lucifer sabía la

en par, tan indignado que s

Tú

varnos de vuelta. —Emmeline interrumpió. —Pronto los m

e falta

da rincón de la habitación, incluso saliendo por debajo de la puerta. Emmeline nunca había viajado a través de D

de pronto, sintieron que disminuía la cantidad. De

sino, sino s

s darme unos minut

tras salir se dirigió rápidamente a su cocina en busca de

r no contarme que E

un motivo y si te enter

o de

ito… Necesito advert

zó una de

pre, a cambiado. Es peligro

yo enfurez

ió con

dvertido, h

una niebla que, cuando se dis

para luego mantener el rostro sombrío. La situación le estaba resultand

*

abiertos. El único que sabía la ubicación era él, así que se trataba de algo al cuál Emmeline ya no quería que él tuviese acceso. H

vo recibió un mensaje de Hobstom indicándole que ya estaba en la cas

da mediante avanzaba por las salas, hasta encontrarse a Hobsom

nde

ardín. —

unto a Lucifer. Lucifer parecía estar diciendo algo, mientras que le daba galletas de avena a las bestias, mi

ar la conversación, pe

portándose co

uno de los dos estaba teniendo una conversa

iene algún otro se

mi lado o ya te irás? Que hayamos sido compañeros no signi

deo llegue con el

bios, al mismo tiempo que un trueno sonó con fuerza en el c

me digas porque rayos el cl

e sí lo es, es saber có

ecesito

to, has armado una

guerra, el que muera

qué le saca

cuidé ese reino

reino, Lucifer. Se te escap

erno. Además, no te quejes. Ese r

s a construir un

dado y como sabrás, no puedo ir por el mun

sí

ra pr

s maliciosamente just

ludó el demoni

cifer se puso de pie.

rmenta no

Asmodeo no entendió m

inexpresivo con la espalda recta a su lado. Minutos después, cuando fueron rodeados por el

a mi bodega. Estoy comenzan

Có

rees e

nto, Em

Aren se arrod

rque no cumples tu puesto? Si tan complicado es ser mi lacayo, ent

lo suplico, cumpliré mi puesto impe

de tiempo para prepararte y no decepciona

mel

—Lamento interrumpirla, l

do, se fue de vuelta a la mansión. Al atravesar los salon

ojos combinados de azul y negro, con heteroc

Ther a su

Niels? —Emmeline la

señ

s encerró todos juntos a que luchen y el que ganaba, iba a ganarse el puesto. Un método antiguo, pero efectivo. La mayoría de ellos eran esclavos, pobres o personas desesperadas por protección, dinero o comid

o a cada uno de ellos, estaba más

tuación. No era machista, pero le pareció patético que, una mujer de u

de cuidar, proteger, matar y morir por mi. Hacen tareas tan simples como traerme agua,

titud todo, señorita y me veo califi

lacayo p

propia saliva, haciendo

ado más. —Le dijo a Aren— Estoy segura

o. —Obedeció

hace años, trabajamos muy

sientes que no es justo, puedo hablar contigo y llegar a un a

aba como su asistente al querer resolve

la

e y servicial posible. Aren se retiró junto a Hobsom, ha

ntes cómoda d

lizabeth, o en todo

s, soy Emmeline Dahlia, espero que te sientas cómoda.

con su mayordomo principal y recibir la inf

quien desees. Aunque, brevemente, te resumo en qué solo hay cinco person

ita que busque a los mejores? Te

gusta. De todas formas, agradezco la ayuda. S

as, mi

*

, mientras almorzaba. —¿Un hombre con nombr

dad, es u

rtante que un Bonde sea cuidado por una mujer, la diferencia de sexos era notoria, la fuerza femenina era diferente a

ajestad? — Baalberith sacudió

¿Le ha pasado algo? —Asmodeo estaba del otro

ó un es

Le

demás? —Interrumpi

ado a Mammon,

én em

bres son parecidos, pero ellos f

dos, cuando todos se reunieron Lucifer se sentó en su habitual trono sin poder. Él habló, explicando la in

dos, aunque cuando la identidad de Emmeline fue des

star siempre a su disposición, aunque cuand

ina, Su

a su boca, con una sonrisa de lado a boca cerrada. —El talismán me mostró u

reina y con su mandato tan firme, tampoco necesitaríamos de una. —Le recor

urmuró pensativo. —¿Cómo

vi, sentí que tenía algo. Aunque de tod

sea que

—Pidió. —Y dejen de buscar a l

o podría tener el ejército ade

Maje

des causar antes de se

y dos mundanos.

en

¿Acaso quiere

entem

ue podré unas d

. Pueden

n iluminados no tendre

rme, pero he notado que antes de perder mi memoria, cree bestias que les ordené ser fieles y hasta ahora lo son. Incluso me tienen cariño y adoran estar junto

n ejército

mejor o ya pueden abandonar el salón? El casino los necesita para que haya diversión. —Alz

esto, Su

taba desi

notó que sus movimientos eran mucho menos dolorosos que antes, incluso pasaban totalmente por desapercibido para él mismo. Antes, el dolor de cada movimiento era como pis

speró. Sin embargo, Gomory no apareció. La figura encerrada en el portal fue Beliar, al cual al apare

nte interceptar e interrumpir. Lucifer observó de reojo la co

, con mucha diversión. Se colocó de cuclillas recogiendo las uvas que Lucifer ofre

rma

*

Hobsom le sonrió con cortesía. —Seguramente podrán

el que tiene todas las llaves. N

ia de lacayo a Aren, el a

chas graci

con cortesía. Al menos se sentía recibida. Siguió caminando hasta la segunda planta, ya se había m

sería mejor amigo o novio de Emmeline, no sabía si ellos tenían algo, tampoco le incumbía pero Emmeline desde que ll

os de Eyra y Niels se quedaba corto con lo bien que tra

é qu

de Aren la sacó d

ojo de

s en su bolsillo y sacándolas

que le dijese cuál es de la casa, de que planta o como dis

detuvo. —¿Me

aves que solamente él tenía así que no podía pasarle

son estas otras, estas de las bodegas del invernadero, estas de las habitaciones del primer piso, estas del segu

le y perfecta memoria, por lo qu

aci

e él se había quedado en blanco y Emmeline o Eyra habían reaccionado. Las mujeres er

veré a tomar mi puesto. —No fue u

Mientras alguien l

ó, estando

cada uno to

se lo cruzó. Mantuvieron contacto visual, Aren la observó esperanzado, como si un sim

le la espalda, murmur

do lleno de vida a su lado, dado que Emmeline seguía inexpresiva con pasos extremadamente lentos y

hacia el jardín e ignorando la mesa junto a sus bestia

veía tan armonioso y lleno de vida. En cambio, en el invernadero, solo Emmeline podía tener acceso

y estaba tan muerto y frágil que con tan sólo un r

entes, observando las hojas trituradas en la palma

guien bastante responsable, m

luso procuró tener las copias d

parece

tas. —Dejó caer las hojas trituradas al suelo, y emboscó una sonrisita. —Contacté

rece, m

viará las cartas, ganándose la confianza del remitente, p

beth puede traic

nterarse y las cosas no correrían a mi favor. —Inclinó la cabeza aun costado. Aren la o

quiere que hab

llevó instantáneamente los dedos a sus labios, pensativ

obsom y las criad

e dio cuenta que Aren también parecía inexpresivo sintió que pronto se daría cuenta el pelig

. El vestido era pegado a su esbelta figura, sin embargo, franjas de tela estaban unidas a sus muñecas a través de brazaletes, p

ha sido cruel conti

almente quiero

rometo. —Aseguró en vano. —

No en

eramente sonrojado y le acar

, pese a sus palabras peligrosas ella parecía muy calmada. —Pero no puedo asegurarme que él siempre sea dócil conmigo, a

ió levemen

uesto, M

unicativos y en un mal término para nadie

elto a respirar. «Sólo es un plan, ella no me abandonará.» esp

n gran

bodega a mis espaldas. Mi confi

lverá

odría parecer adorable, pero en realidad Aren sintió que ejercía tanta fuerza que comenzaba a dolerle y arder.

el mismo destino que Haako

es estaba siendo sujetado. Ella le sonrió cálidamente

*

de sales y velas, no podía salir del círculo. Beliar estaba en una encrucijada, podía quedarse en la invocación y fasti

podía saber su ubicación exacta solo por ver la habitación, pero podía ver como

cruzó sus brazos sobre el, mirándolo con una sonrisa. —

pisar este reino por miedo a padre. Eso marca la diferencia entre

sco. —No me digas que sigu

desde cero. Cada bestia la hice, cada llama la provoque y cada demonio arrodillé par

¿Por qué lo

tarilla, no me sometiste a un duelo, simplemente espe

anito. ¿Cómo puede ser que te cures tan rá

—Lo acortó. —¿Acaso ta

n desobedec

oscientos cinco

ieres capturar con tanto esmero como para

, llenándose de ira. La imagen resultó aterradora por lo que rápidamente Beliar

nde tenía rodeado a Beliar. —Emmeline Dahlia Bon

sas palabras. Lucifer rápidamente había cambiado, ya no parecía acce

pero Lucifer seguía teniendo ese aura peligrosa y ese aura que era capaz de asustar hasta a su padre. Supo de inmediato que no im

aber sobre ella directamente. Lucifer no tenía poder alguno, pero lo conocía y sabía que si

inuó hablando. —¿Acaso ya no tiene

T

a porque cuando vuelva, no serás más que un esclavo que arderá siempre

te… te acabaré. —S

n mano e intento ocultar su enorme sonrisa con las yemas de sus

cito, yo tengo a la