Las horas pasaron volando y pronto llegó el primer día de trabajo de Loraine.
Debido al rumor que se había esparcido como pólvora en internet, los trabajadores del departamento de diseño arquitectónico ya sabían que ella se les uniría.
Y así, en el momento en que la joven entró a la oficina, varias miradas llenas de curiosidad se posaron sobre ella.
"Hola, buenos días a todos. Mi nombre es Loraine Torres y soy la nueva diseñadora. Encantada de conocerlos", se presentó.
"¡Bienvenida! ¡Gracias a Dios que ha venido otra encantadora dama a nuestro departamento!".
"He escuchado mucho sobre ti. Te fue muy bien en la entrevista de trabajo. ¡Incluso despidieron a la directora de Recursos Humanos, Vickie!".