El anuncio de una subasta llevada a cabo por el grupo Bryant y el grupo Universe provocó una nueva oleada de entusiasmo.
Casi todas las empresas de Ciudad A comunicaron su impaciencia e interés por participar en el evento.
Ni siquiera la familia de Jennie, la cual se dedicaba principalmente al negocio de la joyería, pudo resistirse a un proyecto tan codiciado, así que era natural que muchos quisieran participar.
Eso provocó que Loraine se llenara de trabajo.
Por suerte, Cayson había regresado de sus vacaciones después de visitarla en la residencia de la familia Torres, y la estaba ayudando mucho a preparar la subasta.
Loraine había estado desanimada los últimos días, pero la presencia y ayuda del hombre la animó.